El Grupo Municipal Socialista ha denunciado "la nefasta situación" que viven los concesionarios de los quioscos municipales "porque el Gobierno de Noelia Arroyo lleva más de cinco años para renovar la normativa que rige su uso y concesión, porque la actual data de 1998 y está obsoleta".
La actual normativa limita el uso de los quioscos a la venta de prensa y revistas, chucherías y pequeños juguetes, por lo que no son rentables. Arroyo prometió hace cinco años que se iba a renovar la normativa para actualizarla y ampliar el uso que se puede dar a estos establecimientos, pero no se ha llevado a cabo, explica el PSOE cartagenero.
“En febrero aseguró que la nueva normativa se llevaría a junta de Gobierno en marzo, pero no se hizo. En mayo anunciaron que se iban a solicitar informes sectoriales y en junio que se iban a reunir con Hostecar. Pero más allá de los anuncios, no se ha hecho nada y la normativa sigue sin aprobarse”, denuncia el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Manolo Torres.
Mientras, "la mayoría de los quioscos están abandonados o cerrados porque los pocos concesionarios que quedan sufren constantes pérdidas que no pueden mantener"
"Se convertirán en una verdadera oportunidad comercial"
Por su parte, el Gobierno municipal del Partido Popular ha contestado que ultima los detalles de la nueva Ordenanza de Quioscos, “que los va a convertir en una verdadera oportunidad comercial, que sea útil y dinamice la ciudad”, ha dicho la concejala de Comercio, Belén Romero, quien ha recordado que “fue un gobierno del Partido Popular quien ordenó, diseñó y reguló esos quioscos para que formaran parte del mobiliario urbano y va a ser un gobierno del PP el que los revitalice”.
Romero ha insistido en que va a ser una oportunidad comercial para emprendedores, hosteleros y comercio local, porque “la ordenanza contempla una ampliación de los usos autorizables para estos establecimientos, así como una flexibilización de los procedimientos administrativos necesarios para su instalación o modificación”.
“Trabajamos con rigor, para que sea una normativa sólida y durardera, y no oportunista y de ocasión, como acostumbran otros partidos. Se va a actualizar un marco que ya no responde a los hábitos de consumo, a los tiempos de ciudad que vivimos y al potencial turístico de Cartagena”, ha dicho la concejal.
Asimismo, ha insistido en que “no es sólo un reforma administrativa, sino una apuesta estratégica por el entorno urbano, el comercio de proximidad y el emprendimiento local”, que requiere de informes técnicos y jurídicos para garantizar la igualdad de oportunidades y la seguridad jurídica de todos los concesionarios”.