El valor añadido generado directamente por las 26 compañías que integran la Asociación de Empresas del Valle de Escombreras alcanzó el pasado año los 3.243 millones de euros, según el informe presentado hoy por el investigador de la Facultad de Ciencias de la Empresa de la UPCT Antonio García Sánchez. que estima en 5.200 millones el efecto total de su actividad económica.
Las empresas de la asociación operan en el sector energético, químico, petroquímico y logístico. “Un nodo conectado al sistema energético nacional, intensivo en capital, tecnología y empleo cualificado”, subraya el estudio realizado por el grupo de investigación en Análisis Económico,, indicando que la plantilla de las compañías suma 1.678 empleos directos, un 5% más que hace un lustro, con salarios brutos medios de casi 57.000 euros anuales. “Empleo estable, cualificado y bien pagado”, resume García Sánchez.
“El Valle de Escombreras no es solo un importante polo industrial, es también uno de los mayores motores económicos de España y el principal activo estratégico de Cartagena”, resalta el profesor del área de Análisis Económico, quien también resalta que “el Valle ya está pivotando hacia hidrógeno, combustibles renovables y transición energética. No es un legado del pasado, es una plataforma de futuro”.
El grupo de investigación de García Sánchez lleva veinte años analizando el impacto económico de las empresas del Valle de Escombreras en estudios quinquenales. Respecto al de hace cinco años, AEVE ha sumado tres nuevas empresas y casi un centenar de empleados. “Por cada empleo se generan 15 más por el efecto inducido”, ha destacado el presidente de la Asociación, Fernando Quesada.
AEVE aporta 371 millones en impuestos, cotizaciones y tasas portuarias por los 1.315 buques que atrajeron las empresas del Valle el pasado año. “Solo en 2024, fueron más de 348 millones a la Administración Central y más de 22 millones a las haciendas locales”, detalla el informe.
Compromiso municipal y eliminación de trabas burocráticas
Por su parte, el Ayuntamiento de Cartagena ha explicado que ha puesto en marcha una batería de medidas para facilitar el crecimiento y la transformación del Valle de Escombreras, con el objetivo de consolidar este polo como el motor industrial de la Región de Murcia. La alcaldesa, Noelia Arroyo, destacó el compromiso municipal con la eliminación de trabas burocráticas, la ampliación de suelo y el apoyo fiscal a las empresas, en el acto de presentación del informe de la Asociación de Empresas del Valle de Escombreras sobre el impacto socioeconómico de sus industrias, realizado por el Grupo de Investigación de Análisis Económico de la UPCT.
"El crecimiento experimentado desde el último informe de 2019 es considerable, pasando de 23 a 26 empresas y aumentando significativamente su contribución al PIB regional", subrayó la alcaldesa. Para apoyar esta expansión y su necesaria transformación tecnológica y energética, el equipo de gobierno detalló tres líneas de acción concretas.
En primer lugar, la modificación del Plan General de Ordenación Urbana para incrementar en un 30% la edificabilidad en el valle bajo la figura de suelo urbano especial. En segundo lugar, la aplicación de bonificaciones fiscales "de hasta el 95% en el Impuesto sobre Construcciones (ICIO)" para aquellas inversiones que generen empleo. Y en tercer lugar, la agilización administrativa mediante la colaboración con la Comunidad Autónoma para aplicar leyes de aceleración y simplificación empresarial.
"Estamos ayudando fiscalmente, eliminando burocracia y proporcionando más suelo", resumió la primera edil, quien también reclamó de la Administración General del Estado su apoyo para las infraestructuras portuarias como Barlomar o El Gorguel, claves para "el futuro del crecimiento del puerto y, por ende, del Valle".
Por su parte, el presidente de la Asociación de Empresas del Valle de Escombreras (AEVE) y director del complejo de Repsol en Cartagena, Rafael Quesada, confirmó la contribución fiscal total de las empresas, que supera los 370 millones de euros, e incidió en la apuesta por la sostenibilidad. "Las empresas del valle tienen proyectos punteros a nivel europeo en combustibles renovables, economía circular, hidrógeno y eficiencia energética", afirmó, adelantando que el proyecto de hidrógeno verde mantiene su previsión de inicio de obras para 2026.
El rector de la UPCT, Mathieu Kessler, puso en valor la simbiosis entre la universidad y el polo industrial, recordando que gran parte del talento cualificado que trabaja en el valle se forma en sus aulas y que la transferencia de conocimiento es constante. Como muestra, anunció el lanzamiento de una plataforma de "retos tecnológicos" para que estudiantes multidisciplinares trabajen en soluciones reales propuestas por las empresas.
