El 'Cartagena' A-62 ultima los últimos arreglos para poder estar operativo a partir de junio cuando se unirá a las maniobras militares que se llevarán a cabo al sur de las Islas Canarias. El nuevo buque multipropósito (BPM) de la Armada es la nueva generación de buques auxiliares que forman parte de la marina española, junto al Carnota (A-61). Su principal misión es adaptar las necesidades que requiera la Armada en ese momento. Con estas adquisiciones se renueva la flota de buques auxiliares, que llevaban más de cuatro décadas en servicio. “Estos se debe a dos razones. La primera es la falta de recursos y la segunda es que, si se realiza un buen mantenimiento, la vida útil de los buques es amplia, por lo que siguen cumpliendo su función”, afirma el comandante del ‘Cartagena’ (A-62), Carlos Cerdido.

El ’Cartagena’ A-62 fue adquirido el pasado mes de septiembre a la empresa noruega Vestland Offshore que le había bautizado como ‘Ocean Fortune’. Originalmente su función era la prospección sísmica para la localización de yacimientos de petróleo y gas en el Mar del Norte, y a prestar apoyo a plataformas de extracción de esos recursos. Su conversión en buque de la Armada se ha llevado a cabo en el Astillero de Cádiz. “La adaptación se centró principalmente en la instalación de los sistemas de comunicaciones, para garantizar su interoperabilidad con las demás unidades de la flota y en el repintado del buque en color gris, siguiendo los estándares de camuflaje y visibilidad”, afirma la Armada en un comunicado facilitado a los medios.

Con una propulsión plenamente eléctrica, “permitiendo ser más respetuoso con el medio ambiente”, afirmó Cerdido, cuenta con Sistema de Posicionamiento Dinámico, una novedad en los buques de la Armada, lo que permite que el barco mantenga la posición, con un metro de error, sin necesidad de anclar. Esto resulta muy útil en situaciones como apoyo a buceadores, recogida de minas, poder suministrar tanto combustible (con una capacidad de transporte de 2.000 toneladas), agua o alimentos.

Otra de las novedades de este nuevo buque de la Armada es su capacidad de remolcar hasta 70 toneladas, lo que permite auxiliar a cualquier buque de la flota española. Además, podrá retomar misiones científicas en la Antártida, ya que posee cota de hielo. En el futuro, también podrá colaborar el adiestramiento del resto de unidades de la flota como la fuerza de medidas contraminas, la flotilla de submarinos o los buques de acción marítima. “Posee la capacidad de apoyo durante ejercicios y maniobras apoyando a otras unidades de superficie, actuando como buque minador, de apoyo a buceadores o buque de mando”, reza el dossier de prensa remitido a los medios durante la visita realizada este jueves.

Aunque no cuenta con una cubierta de vuelo, está previsto que el ‘Cartagena’ tenga próximamente capacidad aérea para VOD (Vertical Onboard Delivery). “Esta capacidad resulta crucial en situaciones donde es necesario realizar operaciones logísticas, traslados o entregas de suministros y personal, incluso en zonas de difícil acceso o cuando no es posible utilizar un helipuerto tradicional”, señala la Armada.