VALÈNCIA.
Celia Cantero
Murcia, 1 jun (EFE).- Durante seis largas semanas, Carmen Roca acompañó en la cama de hospital a su marido Carlos, en coma por un derrame cerebral, y le habló a diario, leyó, cantó y trasladó mensajes de sus amigos en busca de esperanza. Era 6 de octubre de 2020 cuando los médicos le informaron de su muerte y, de forma casi instantánea, respondió afirmativamente a la posibilidad de donar sus órganos. "He regalado vida y he dado esperanza a cinco personas, y eso me llena de felicidad".
En una entrevista con EFE cuando se celebra el Día Nacional del Donante de Órganos, esta madre de dos hijos, que enviudó con 46 años, explica que su marido siempre le había manifestado su voluntad de ser donante, pero jamás pensó que se enfrentaría tan pronto a esa realidad. "Carlos estaba muy concienciado y yo lo tenía claro, pero siempre te lo imaginas para un futuro muy lejano".
"Cuando ya no hay esperanza posible, cuando te dicen que no hay nada que hacer, regalas vida y esperanza a los demás", subraya esta mujer, que en un momento tan duro como el que vivió tuvo una respuesta afirmativa tan rápida que los médicos llegaron a advertirle de la trascendencia de la situación y de la conveniencia de que hablara con uno de los psicólogos de la unidad de trasplantes.
"Es curioso porque dije que no. No era necesario pensarlo mejor, como me dijeron los médicos, porque estaba muy concienciada ya", recuerda Carmen, que dos o tres meses después de esa fecha recibió una carta de agradecimiento de los cinco trasplantados, dos de ellos de Santander y el resto de Murcia, en el que informaban de su alta hospitalaria y su evolución favorable.
El escrito, enviado a través del hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde estuvo ingresado su marido y se efectuaron las extracciones y los trasplantes, lo guarda emocionada porque es una prueba de que "los riñones, pulmones y el hígado de Carlos viven".
Según datos de la Consejería de Salud de Murcia, el hospital universitario Virgen de la Arrixaca es un año más el primer centro hospitalario de España en obtención de donantes, con un total de 66 en 2021, y una tasa de negativas familiares inferior a la media nacional, con entre el 8 y el 10 por ciento.
Para el coordinador regional de trasplantes, Ricardo Robles, este Día Nacional del Donante debe ser de homenaje a la generosidad de las familias que, en momentos de duelo, dan una oportunidad de vivir a pacientes que no podrían hacerlo de otra manera, y de reconocimiento también a los profesionales sanitarios que conforman, de forma altruista, las distintas unidades de trasplantes de los hospitales murcianos.
Ana Gonzálvez Fortes es enfermera perfusionista y compagina su trabajo en el mismo centro hospitalario con su tarea en la unidad de trasplante renal.
Según cuenta a EFE, se trata de un "mundo paralelo" al trabajo habitual del quirófano porque no está programado, las extracciones y trasplantes no entienden de hora, y se producen además tras un laborioso proceso de comprobación de compatibilidad entre donante y receptor en el que intervienen numerosos profesionales.
"Muchas veces, además, no se pasa bien en la extracción por los perfiles de edad de los donantes", reconoce esta enfermera, quien atribuye el éxito del sistema de trasplantes de Murcia a la importante conciencia social existente y a la buena coordinación de los equipos médicos, ejemplo para la ONT.
El coordinador regional considera, no obstante, que la tasa de negativas es mejorable y podría llegar a ser nula "si conseguimos que cualquier persona que está dispuesta a aceptar un órgano para él o uno de los suyos fuera capaz también de donarlo".
En el marco de esta efeméride, la Organización Nacional de Trasplantes y el Hospital Virgen de la Arrixaca celebran mañana y pasado unas jornadas de debate sobre los "Nuevos escenarios y retos actuales de la donación", en la que se hablará de donación pediátrica, aspectos humanos de la donación, covid y trasplantes, eutanasia, y bioética y conflictos en la relación UCI/donación, entre otros temas. EFE