CARTAGENA. Tras cumplir dos años en el cargo como presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena, Yolanda Muñoz trata de mantener el pulso del organismo que dirige, sin que la pandemia condicione los objetivos claros que tiene establecidos desde su nombramiento allá por diciembre de 2019. En este tiempo ha tenido que lidiar con uno de los periodos más inestables, pero lo hizo con la firme decisión de que la APC sirviera también como palanca generadora de proyección económica para el entorno portuario, pero también para el resto de la Región.
Ahora con Barlomar como el magno proyecto que supondrá un antes y un después en el crecimiento del Puerto de Cartagena, aprieta los dientes para caminar firme hacia una nueva etapa de desarrollo y futuro. En la jerga científica de la ingeniería marítima se le llama 'Barlomar' a la dirección de donde vienen las olas. Para el Puerto, es el nuevo y ambicioso proyecto que se pone en marcha en Cartagena, en el que se invertirán 822 millones de euros y que generará 10.000 puestos de trabajo. La nueva terminal marítima polivalente ocupará 58 hectáreas en el puerto de Escombreras.
-¿Qué ganará el Puerto de Cartagena con Barlomar?
-Futuro. Gana presente y futuro para el Puerto. Tenemos un problema de crecimiento. El valle energético cada vez crece más. Hay inversores, sobre todo con las energías del futuro, hidrógeno, ecofrío, que ya llaman a nuestra puerta y que quieren estar aquí, utilizando los servicios óptimos de calidad y coste. Intentamos cubrir todas las demandas, pero nos las vemos y las deseamos, porque no damos para más. Cartagena puede atender mucho más de tráfico de mercancías, porque de todo lo que pasa por delante del Puerto solo un 1% se queda aquí. A día de hoy perdemos mucha competitividad no solo con el resto de puertos españoles, sino con puertos europeos y del norte de África.
-¿Cuánto está perdiendo Cartagena por la falta de una nueva terminal polivalente de estas características?
-Muchísimo. Con Barlomar, que es una ampliación y crecimiento del Puerto contenido y prudente a medio plazo, hablábamos de un millón de contenedores en nuestras instalaciones, más lo que se puede generar para granel sólido, que sería una gran inversión, y la potenciación de la industria offshore. Si no podemos atenderlos, no seremos el referente del Mediterráneo, se buscarán otro país. Es una cuestión de ámbito nacional. Barlomar es una necesidad imperiosa y urgente. Queremos una ampliación muy justificada, cumpliendo medioambientalmente, que sea intermodal, moderna y eficiente energéticamente. Es una necesidad y el presidente de Puertos del Estado así lo asumió en su última visita.