CARTAGENA. La Guardia Civil ha detenido a cuatro pescadores por la captura ilegal de 180 kilos de anguila europea; especie cuya pesca está prohibida dada su escasez en el Mar Menor. El valor en el mercado negro asciende a los 2.000 euros, según la estimación de la Benemérita. Los presuntos autores han sido investigados por un supuesto delito contra la flora y la fauna.
Las anguilas se encontraban en la zona próxima a la lonja del lugar, donde los pescadores profesionales descargan sus capturas. Los ejemplares fueron liberados. Hasta hace una década, llegaban a los mercados europeos 500.000 toneladas de pescado ilegal cada año, no declarado o no reglamentado, lo que suponía un coste de más de 1.100 millones de euros, perjudicando a las comunidades locales y a sus negocios, así como a los recursos pesqueros marinos, según informes realizados por las ONG EJF, Oceana, Pew y WWF.
El mercado negro en el sector de la pesca supone el 15% de las cazas globales, según el Informe del Sector Pesquero Español en 2017. En España, la legislación vigente impone sanciones más severas a este tipo de actividades, permitiendo actuar contra quienes realicen operaciones ilegales en buques extranjeros. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el 77% de las poblaciones de peces se encuentran completamente explotadas o sobreexplotadas, mientras la demanda de pescado sigue creciendo y la pesca ilegal y no regulada continúa expandiéndose.
La operación se enmarca en la actuación del Seprona en su protección del ámbito natural y de la biodiversidad regional. En este caso, la colaboración ha sido entre el Seprona de Torre Pacheco y el Servicio de Pesca de la Región de Murcia.