CARTAGENA. Como cada septiembre, Cartagena se viste de misterio. Así, un año más, la ciudad se convierte en el epicentro de la literatura negra y de misterio de nuestro país, gracias a las jornadas Cartagena Negra, que alcanzan ya su octava edición y que tras los dos años de pandemia regresan a su duración habitual, cinco días, lo que demuestra, según sus organizadores, que "el poder de la cultura es capaz de sobreponerse a cualquier adversidad".
Un total de 34 autores 'sospechosos' participarán en las jornadas, entre los que se encuentran Rosa Ribas, que será la encargada de inaugurar literariamente esta edición, Lorenzo Silva, Cristina Higueras, Elia Barceló, Empar Fernández, Santiago Díaz, Noemí Trujillo o Jordi Ledesma. Escritores muy conocidos que compartirán mesa y palabras con otros tantos a los que también reconocerá el lector del género.
Estos autores seguirán el 'modus operandi' de participar en diferentes actividades, entre las que destacan cuatro clubes de lectura coordinados por María del Carmen Rodal, responsable de la Red Municipal de Bibliotecas de Cartagena (que hace días completaron el número de asistentes).
También estarán presentes en mesas redondas en las que hablarán del impulso que muchas editoriales están dando a autores del género negro, potenciando la aparición de nuevos nombres y títulos muy interesantes. Sin olvidar tampoco la dificultad de escribir a cuatro manos, una técnica que parece estar tomando auge en el mundillo negro, y que debe conjugar el estilo y la personalidad de cada pareja de autores. Además, se hablará, en este mundo dominado por la imagen, del desafío que supone llevar una historia del papel a la pantalla, e igualmente de nuevos enfoques y temas que poco a poco van enriqueciendo los cánones del género del misterio.
Todo se completará con presentaciones de libros, la proyección de los cuatro trabajos finalistas del concurso de cortometrajes negros o la celebración de ya tradicional concurso de microrrelatos en vivo 'Deje aquí su sombrero', sin olvidar los dos acontecimientos que quizá capitalizan, por lo emotivo, cada edición: el fallo y la entrega de los dos premios de novela, el IV Icue Negro para novelas debutantes, y el IV Cartagena Negra.
Las cuatro novelas finalistas del premio ICUE Negro son Nunca sabes quién llama de Mar Moreno, Muerte nupcial de Inés Doménech, Pisto a la bilbaína de José Francisco Alonso y La Dentellada de Eduardo Fernán . Los finalistas del premio Cartagena Negra son Santiago Díaz, Mez Marías, Manuel Ríos y Félix García. El director de Cartagena Negra, Francisco Marín, ha dicho que seleccionar a los finalistas ha sido "costoso" para el equipo porque las novelas de los debutantes son "muy interesantes".
Todos los eventos -salvo una presentación en el Café Lab y el concurso de microrrelatos que tiene lugar en la cafetería Mr. Witt-, se desarrollarán en el Auditorio El Batel de Cartagena, un 'lugar del crimen' con entrada libre, "mostrando una vez más la voluntad que estas jornadas tienen de llevar la cultura a todos los ciudadanos, y siguiendo además una de sus máximas, la que defiende que lo más importante de ellas es el público lector y su conexión con los autores".
El cartel de Cartagena Negra de este año está inspirado en la película Arsénico por compasión, dirigida por Frank Capra y protagonizada por Cary Grant; un clásico del género al que no le faltan buenas dosis de sentido del humor. Como le ocurre a las propias jornadas, que también hacen numerosos guiños a sus seguidores (como que las entrañables tías del filme obsequien con un asiático a sus invitados).
El gerente de Los Habaneros, Bartolomé Vera, ha manifestado su agradecimiento por elegir el hotel como punto de encuentro de los autores: "La cultura es muy importante e intentamos colaborar porque sabemos el esfuerzo que conlleva estas jornadas".
Toda la información y el programa de las jornadas puede consultarse en las redes sociales y la web de Cartagena Negra: https://www.cartagenanegra.com/