Más de 2.300 regalos para fomentar las compras en el comercio de proximidad en Cartagena, La Unión, Mazarrón y Fuente Álamo

CARTAGENA. La Cámara de Comercio de Cartagena, en colaboración con la Dirección General de Comercio de la CARM, ha puesto en marcha una campaña de dinamización del comercio de cercanía. En esta segunda edición, se repartirán más de 2.300 regalos para todos los vecinos de las localidades de La Unión, Cartagena, Mazarrón y Fuente Álamo que compren en el comercio local de sus correspondientes municipios. Para poder optar a cualquier regalo, que va desde joyeros, mochilas, enchufes inteligentes, palos de selfie, auriculares o incluso freidoras de aire, hay que presentar los tickets acreditativos de haber hecho una compra en pequeños comercios -a excepción de franquicias y grandes cadenas- de al menos 30 euros.

Los tickets -máximo de tres por persona y día- se podrán canjear por regalos en la sede de la de la Cámara de Comercio de Cartagena hasta el próximo 31 de julio o bien hasta el fin de existencias. Gracias a los buenos resultados del pasado año -cerca de tres mil regalos repartidos-, se ha reeditado esta campaña en 2024, para la que se han destinado casi 36.000 euros. El gran reto es apoyar al comercio de proximidad y conseguir que los vecinos, visitantes y turistas mantengan vivo el pequeño y mediano comercio de los núcleos poblacionales a los que va dirigida la misma. Somos conscientes, como bien indicaban tanto el director general de Impulso al Comercio, de la Comunidad Autónoma, Rafael Gómez, como el propio presidente de la Cámara de Comercio de Cartagena, Miguel Martínez, y Carlos Bernabé, presidente de los empresarios de La Unión, del daño que han hecho las grandes empresas de comercio online, principalmente Amazon, que ha derivado las compras de los usuarios a internet. "Queremos conseguir un impacto directo en todos los comercios e incrementar las ventas de nuestro pequeño y mediano comercio", explicaba Gómez.

Aunque no tienen cifras actualizadas, la realidad es la pérdida paulatina de pequeños comercios en las zonas céntricas de las ciudades, especialmente Cartagena, por lo que, afirman, la solución no es única ni fácil. "No tenemos una varita mágica para cambiar esta realidad, pero necesitamos también que desde las administraciones se impulse la compra con este tipo de campañas formativas, se estimule fiscalmente la creación de negocios o fórmulas dirigidas tanto a los usuarios, con productos diferentes y exclusivos, como los procesos de profesionalización de los empresarios que abren negocios", explicó Martínez.