MURCIA. Los Servicios de Mediación Familiar dependientes de la Consejería de Política Social, gestionados a través de la Dirección General de Familias y Protección de Menores, atendieron en 2020 a un total de 136 familias en la Región de Murcia, de los que actualmente siguen quedando 70 casos activos, 68 en el Punto de Encuentro Familiar (PEF) y 2 en el Servicio de Mediación Intergeneracional.
Estos servicios tratan de preservar las relaciones intrafamiliares, prevenir o minimizar los conflictos que surgen en el seno de la familia, evitando el deterioro de las relaciones, la apertura de procedimientos judiciales contenciosos, poner fin a los ya iniciados y/o reducir sus consecuencias negativas.
Para ello, la Comunidad cuenta con dos Puntos de Encuentro Familiar y con el Servicio de Mediación Intergeneracional. Los PEF, en los que se han atendido 116 casos en el último año, son un espacio creado para garantizar el derecho de los niños de relacionarse con sus padres y/o familiares cuando no convivan con estos por motivo de separación entre los progenitores o de separación del niño de ambos por la aplicación de medidas de protección.
Según las características de cada caso de los que se presentan en el PEF, y en función del interés del niño, el servicio se limita a supervisar la ejecución de las visitas, evitando el desencadenamiento de conflictos entre las partes, o se plantea un proceso de intervención con las partes hacia el ejercicio autónomo de la coparentalidad, utilizando para ello técnicas de mediación.
Actualmente, la prestación de este servicio, dependiente de la Consejería, se realiza a través de la Asociación de Mediación de Murcia, y está abierto un proceso de selección de una entidad para la realización de un concierto social que permita la ejecución de este servicio con un incremento presupuestario, que supondrá la ampliación de centros para la realización del Punto de Encuentro y el incremento de casos a atender.
Durante el año 2020, este servicio atendió a 20 familias que acudieron para solicitar el inicio de una intervención de mediación familiar, un 33 por ciento más que en 2019, aspecto que resulta "significativamente positivo teniendo en cuenta la situación sanitaria y de confinamiento vividos durante tantos meses del año, ya que es muestra de que el servicio funciona hasta en los momentos más complicados", según el director general de Familias y Protección del Menor, Raúl Nortes.
Cabe destacar que a lo largo del proceso de mediación con estas familias, en el 66 por ciento de los procesos iniciados los participantes obtuvieron un acuerdo. Además, en ningún caso fue necesaria la interrupción del proceso por parte del equipo técnico y, actualmente, la intervención continúa desarrollándose tan solo con dos familias.