MURCIA. El ala pívot internacional letón Rinalds Malmanis espera "aportar más" al UCAM Murcia Club Baloncesto, equipo de la Liga Endesa en la que afrontará su tercera temporada y del que destaca "la química, el talento y el trabajo".
Malmanis, de 25 años y que recaló en el cuadro murciano en febrero de 2020 procedente del Real Betis tras haber pasado por la cantera del Baskonia, acabó bien la pasada campaña cuando hasta entonces había pasado casi inadvertido.
Ahora su propósito es ganar protagonismo en el conjunto entrenado por Sito Alonso y dar un salto en su progresión.
"He trabajado mucho y a ver si puedo ayudar más al UCAM CB esta nueva temporada. Estoy en forma por haber estado entrenando durante todo el verano", ha comentado el interior universitario, quien ha estado con la selección de su país desde el 9 de junio y prácticamente no ha parado porque también estuvo ejercitándose con el preparador físico del club Manu Marín en Madrid.
"Estoy contento por estar otra vez y trabajar junto a los compañeros", ha indicado este martes tras la sesión realizada por la mañana.
Según Malmanis, el hecho de que se mantenga el bloque, con sólo las incorporaciones de Thad McFadden y Chris Czerapowicz, es un punto a favor. "Nos mantenemos muchos jugadores en la plantilla y eso hace que haya una buena química. El equipo enseñó la pasada campaña que puede competir bien contra rivales grandes y es importante la continuidad en un grupo que tiene mucho talento y trabajo, por lo que espero que nos vaya muy bien", ha manifestado.
En cuanto a su aportación, el de Valmiera ha reconocido lo siguiente: "El pasado curso jugué bastante como pívot, pero lo que necesite Sito de mí se lo daré en la cancha".
Por otra parte, el club ha comunicado que disputará otro encuentro amistoso de pretemporada, el que le enfrentará al Urbas Fuenlabrada, también equipo de la Liga Endesa, el viernes 10 de septiembre a las siete de la tarde en el pabellón Fernando Martín de la localidad madrileña.
Será en el Torneo de las Fiestas de Fuenlabrada y el choque se celebrará con público. El acceso, restringido por la covid-19, estará controlado por el propio club fuenlabreño, que dará prioridad a sus abonados.