MURCIA.(EP) Investigadores del Sistema de Salud Henry Ford en Detroit, en Estados Unidos, ha descubierto que los pacientes con hepatitis C crónica que son tratados con medicamentos antivirales de acción directa tienen menos probabilidades de ser hospitalizados o buscar atención de emergencia para problemas de salud relacionados con el hígado y no relacionados con el hígado.
El estudio, publicado en línea en 'Clinical Infectious Diseases', subraya el efecto extraordinario de estos nuevos antivirales, que han demostrado curar la hepatitis C en el 98% de los pacientes que los toman. Se dice que los pacientes están curados cuando el virus ya no es detectable en su sangre.
"Los hallazgos de nuestro estudio muestran que curar la hepatitis C no solo elimina el virus, sino que también mejora la salud general de los pacientes. Esto es consistente con nuestros estudios anteriores que mostraron que el tratamiento eficaz de la hepatitis C también reduce el riesgo de que los pacientes desarrollen otras afecciones de salud como diabetes, enfermedad renal, accidente cerebrovascular y ataques cardíacos", ha señalado Stuart Gordon, director de la División de Hepatología de Henry Ford y autor principal del estudio.
Según datos federales, al menos 2,4 millones de personas viven con hepatitis C en los Estados Unidos y la mayoría no sabe que tiene el virus. Como resultado, corren el riesgo de padecer cáncer y enfermedades hepáticas potencialmente mortales. Las tasas de nuevos casos de cáncer de hígado han aumentado un 38% entre 2003 y 2012.
El estudio dirigido por Henry Ford se realizó en colaboración con investigadores del Sistema de Salud Geisinger, Kaiser Permanente en Hawái y Oregón y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Comprenden el Estudio de cohorte de hepatitis crónica, que ha estado recopilando y analizando datos extraídos de los cuatro sistemas de salud para evaluar el impacto de la hepatitis C y B en la población estadounidense.
Se cree que este estudio observacional es el primero en examinar la utilización de la atención médica en pacientes con hepatitis C con y sin enfermedad hepática avanzada y tratados con antivirales de acción directa o AAD. Los investigadores analizaron los datos de 6.100 pacientes, la mitad de los cuales fueron tratados con AAD y la mitad de los que no.
"Hay beneficios tangibles posteriores de estos tratamientos antivirales. Si se cura del virus, su salud en general mejorará y es menos probable que lo hospitalicen por alguna otra afección de salud", señala el investigador.