BRUSELAS. La arquitectura financiera, los criterios de sostenibilidad medioambiental, la seguridad alimentaria y las ODS contra el cambio climático o la economía circular no fueron nada comparado con el compromiso alcanzando en la reunión mundial de líderes del G20 sobre la salud global, en la Cumbre de Roma: "Lo más importante es lavarse las manos con agua y jabón". En el Año I d. C. -después de la covid- aún existían microbios que se transmitían directamente entre humanos y animales. Aún existían animales que se relacionaban con los humanos…
Los objetivos medioambientales fueron encomendados a la UNFCCC-COP26 o Cumbre de Glasgow contra el cambio climático, dos días después, tras comprometerse con el objetivo del Acuerdo de París de mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de los 2ºC y continuar con los esfuerzos para limitarlo a 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales. El mensaje llevaba un guiño especial a los mercados de la energía, que habían comenzado la guerra por su cuenta. Aquí, LaGranFábrica tenía mucho que decir.
De lado quedaron los temas de siempre: las migraciones y las personas desplazadas, la igualdad y el empoderamiento de la mujer, la educación y el empleo, la fiscalidad internacional y los bitcoins, el transporte y la movilidad, las inversiones y el comercio, la brecha digital, la inclusión financiera, el turismo, la cultura, la anticorrupción… Minucias.
Y de lado quedaron también en la Cumbre de Glasgow dos grandes potencias: Rusia y China. Sus líderes no estuvieron presentes, aunque se comprometieron a mantener el objetivo de cero emisiones para 2060, diez años después que la Unión Europea, cuya meta se marcó para 2050. Claro que todo aquello se preveía antes del CaosPrevio y de la implosión de las minas de carbón en el Territorio-AsiaPacífico.
Pero nada de todo ello sería posible sin la Task Force Finanzas-Salud del G20, que se marcó un objetivo global: la Cobertura Universal de Salud. Para ello, era necesario seguir con la lucha contra la covid-19 a través de la vacuna y de los Hubs de ARNm recientemente establecidos en Sudáfrica, Brasil y Argentina, con acuerdos conjuntos de producción y procesamiento.
Y, lo más importante, había que abordar los riesgos que surgen de la conexión entre los seres humanos, los animales y el medio ambiente, en particular con la aparición de enfermedades zoonóticas y la resistencia a los antimicrobianos. La Organización Mundial de la Salud decidió lanzar la Academia de la OMS y el Laboratorio de Personal de Salud Pública. Todos estos organismos debían prevenir una nueva pandemia, mientras la actual siguió mutando hasta el infinito. En el otoño de 2021 la Unión ya luchaba contra la variante Delta Plus.
—Llueve, David. De nuevo esa lluvia gris y pesada que cada cierto tiempo se tiñe de rojo, y nos obliga a confinarnos de nuevo y a paralizar la vida como en una eterna e intermitente hibernación. Todo esto no lo pudieron prever. Como tampoco el que no iba a haber suficiente agua para lavarse las manos en todo el mundo, porque estaban más entretenidos en sus Cumbres.
—Lo siento, Laura, no puedo seguir conectado. Acaba de explotar otra mina en el sur del Territorio-Anatolia y tenemos que evacuar a los eIngenieros, antes de que nos quedemos sin tasa de reposición. LaGranFabrica sigue controlando el suministro y el recrudecimiento de la III Guerra Asia-Pacífico no nos permite el transporte de semiconductores…