VALENCIA. Más de dos años han transcurrido para ver nacer una nueva sociedad de inversión de capital variable, es decir, lo que se conoce como sicav. Habría que remontarse a mayo de 2020, cuando veía la luz Blacksmith Capital, presidida por Samuel López Pérez, director general de grandes patrimonios del Grupo Herrero Brigantina, tal y como avanzó entonces este diario, Y es que estos vehículos financieros andan -cada vez más- de capa caída como viene informando periódicamente. Sin ir más lejos entre enero y septiembre del año en curso se han esfumado más de dos al día.
La nueva sicav corresponde Nebraska Investments, que ya ha recibido el pertinente código ISIN de la Agencia Nacional de Codificación de Valores (ANCV), con el número ES0112699006. Será en las próximas fechas cuando la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) le de su visto bueno. Pero, ¿quién está detrás de dicho vehículo financiero? Ignacio Monreal Easo.
A priori un nombre más, pero a los más futboleros seguro que les suena Nacho Monreal. El exfutbolista navarro criado en las instalaciones de Tajonar en Pamplona, que pasó por Osasuna -transcurrirán muchos años hasta que los 'rojillos' vuelvan a tener dos laterales de la talla de Monreal y su amigo César Azpilicueta-, Málaga, Arsenal y Real Sociedad hasta que el pasado mes de agosto decidió colgar las botas. Todo ello después de haber jugado en la Selección Española.
Nebraska Investments fue constituida el pasado 26 de octubre en Madrid. Concretamente en la calle Serrano número 37, es decir, el domicilio social de Andbank Wealth Management, la sociedad gestora de instituciones de inversión colectiva de Andbank España, que precisamente ejerce de gestora de dicha sicav; mientras que la depositaría la lleva Banco Inversis. El capital suscrito y desembolsado corresponde al mínimo legal establecido en los 2,4 millones de euros.
En el consejo de administración de Nebraska Investments figura como presidente el propio exfutbolista, mientras también están su hermano Francisco Javier Monreal Eraso; y la madre de ambos, María Pilar Eraso Larumbe. Por su parte, el auditor es Deloitte.
Nacho Monreal ha optado por canalizar sus inversiones a través de esta figura a la baja desde que el pasado 1 de enero entrara en vigor un cambio legal que afecta a la manera en que tributan estas sociedades de inversión de capital variable. En concreto, esta modificación establece un régimen transitorio durante 2022 por el que se puede acordar la disolución y liquidación de estas sociedades sin costes fiscales y diferir la tributación de las ganancias derivadas de la liquidación; pero eso sí, siempre que los accionistas reinviertan la totalidad de su cuota de liquidación en otras instituciones de inversión colectiva (IICs) españolas.
Las sociedades tienen hasta el 31 de diciembre de 2022 para acordar su disolución y hasta el 30 de junio de 2023 para realizar los actos y negocios jurídicos necesarios para liquidar la sociedad hasta su cancelación registral, pudiendo prorrogar hasta el 31 de julio de 2023 la reinversión de las cuotas si se acogen al régimen transitorio.
No hay que olvidar que desde el pasado 1 de enero se impone una inversión mínima de 2.500 euros -o 12.500 euros en el caso de una sicav por compartimentos-, con el fin de contabilizarlas dentro del mínimo de cien participantes necesario para tributar al 1% en el Impuesto sobre Sociedades. Asimismo, el número mínimo de accionistas tiene que permanecer como mínimo en las tres cuartas partes del periodo impositivo.
Todo ello está vigilado por la Agencia Tributaria, que ha tomado el relevo a la CNMV, que sigue apremiando a las sicavs que han anunciado que pasan a mejor vida, bien transformándose en otro tipo de sociedades, bien integrándose en fondos de inversión o directamente liquidándose. Finalmente solo quedarán en pie aquellas sociedades de inversión de capital variable más grandes.