Foto: LA ROCAMURCIA. La línea que divide los servicios avanzados y la industria es cada vez más difusa, dado que la actividad productiva ha entrado en la llamada industria 4.0 con la incorporación de las nuevas tecnologías a los procesos de desarrollo y creación industrial. El sector de los servicios aportaba en 2019 (últimos datos publicados) al VAB regional el 69,20% del total, 5,6 puntos por debajo de la aportación media nacional del 74,80%; y ello incluyendo los servicios públicos, que en la estructura productiva de la Región tienen más peso que a nivel nacional. Se evidencia la debilidad de este sector en la actividad productiva de la Región, que es clave en el presente y vital para el desarrollo económico y social.
El sector de los servicios está integrado por las actividades dedicadas a la venta: comercio al por mayor y al por menor, reparación de vehículos de motor y motocicletas, transporte y almacenamiento, hostelería, información y comunicaciones, actividades financieras y de seguros, actividades inmobiliarias, actividades profesionales, científicas y técnicas, actividades administrativas y servicios auxiliares, actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento, reparación de artículos de uso domestico y otros servicios, como las actividades públicas: administración publica y defensa, seguridad social obligatoria, educación, actividades sanitarias y de servicios sociales.
"los servicios son claves para el crecimiento económico y social de la Región"
El pasado 24 de junio el INE publicaba la Estadística estructural de Empresas del sector de los servicios, con los datos referidos al año 2019, tanto de la cifra de negocios como de la ocupación media, en millones de euros y en porcentajes sobre el total nacional. Hemos retrocedido y recuperado los datos publicados en el año 2013, para analizar su evolución, tanto a nivel regional como nacional, y constatamos que en el año 2013 la cifra de negocios en la Región de este sector fue de 6.749 millones de euros, lo que representa solo el 1,80% del total nacional, y la ocupación media de 113.540 personas, el 2,30% del total nacional, evidenciando al baja productividad en este sector en su conjunto.
En el año 2019, la cifra de negocios de la Región fue de 9.497 millones de euros, manteniendo igualmente solo el 1,80% del total nacional (muy por debajo de nuestra potencialidad, dada nuestra situación en la fachada mediterránea, y muy por debajo del porcentaje de población del 3.21% que aportamos al total nacional). La ocupación media ha sido de 152.443 personas, el 2,50% del total nacional. En cuanto al crecimiento en la cifra de negocio del año 2019 con respecto al año anterior, en la Región crecía el 8,90%, lo que suponía un crecimiento mayor que la media nacional del 6,70%, y en cuanto al empleo el crecimiento medio nacional era del 4,30% y en la Región lo hacía en el 5,30%.
El cuadro nos muestra la realidad de las actividades que integran el sector de los servicios en la estructura productiva, tanto en su aportación al VAB como en el total de ocupados, y su evolución entre los años 2013 y 2019, tanto a nivel regional como nacional.
La aportación del conjunto de las actividades del sector servicios a la venta al VAB regional supuso en el año 2013 del 50,00% del total, 6,1 puntos inferior a la aportación media nacional del 56,10%. Si sumamos los servicios públicos con el 20,60%, muy superior en la región a la media nacional del 18,90%, la aportación al total del VAB fue del 70,60%, mientras que la media nacional fue del 75,00%.
En el año 2019 en total de actividades del sector de los Servicios dedicadas a la venta aportaban al total del VAB regional el 49,70%, 7,1 puntos inferior a la aportación media nacional del 56,80%, evidenciando el largo camino a recorrer en un sector como los servicios, clave para el crecimiento económico y social en el que la Región cuenta con claras ventajas competitivas si se ponen en marcha todas sus potencialidades. Si sumamos los servicios públicos que supusieron el 19,50%, que siguen por encima de la media nacional del 18,00%, la aportación al total del VAB fue del 69,20%, mientras que la media nacional fue del 74,80%.
Hemos de tener en cuenta que al analizar estos datos y su comparación en porcentajes es sobre el total regional VAB de cien puntos, por ejemplo en el sector del comercio, que incluye entre otros el turismo, en el que la Región esta muy lejos de su potencial y del de las provincias de su entorno, el comercio en su conjunto aportaba en 2019 el 24,10% del total regional, mientras que a nivel nacional su aportación era del 23,80%.
En el cuadro se pueden analizar las diferencias entre las actividades del sector de los servicios, a nivel regional y la media nacional. donde más patente se hace el largo camino a recorrer por la región es al constatar el diferencial negativo en actividades fundamentales como información y comunicaciones en los que la aportación al total del VAB regional que en 2013 aportaban el 1,80% frente al 3,90% de la media nacional y en 2019 aportaron el 1,40%, 2,4 puntos por debajo de la media nacional del 3,60%.
Y en las actividades profesionales, científicas y técnicas, que en 2013 aportaron al total del VAB regional el 5,30% mientras que la media nacional era del 7,90% y en 2019 aportaban al total del VAB regional el 6,40%, 2,7 puntos por debajo de la media nacional del 9,10%.
Datos que reafirman la urgencia y la necesidad de un plan regional para impulsar la implantación de las nuevas tecnologías y su desarrollo, como big data, inteligencia artificial, impresión 3d, comercio electrónico, etc., es apostar por el futuro, a la vez que impulsar el total aprovechamiento de las ventajas comparativas con que cuenta la región, desde su situación estratégica con la puesta en marcha de El Gorguel, al desarrollo de su capacidad logística con la conexión ferroviaria por el histórico corredor con Albacete y el centro y norte peninsular y con el corredor ferroviario de mercancías por el mediterráneo.
En turismo nuestras ventajas comparativas son excepcionales, desde contar con la ciudad santa de Caravaca o el Teatro Romano, la existencia de uno de los lugares únicos en Europa, La Manga y el Mar Menor, campos de golf, centros de congresos, entre otros, junto a la existencia de empresas de la región que son lideres en el mundo en alimentación, plásticos y química, entre otras, el polo energético de escombreras. Cuanto más retrase más difícil será atraer inversores en un mercado donde la competencia entre territorios es cada vez más dura y difícil, y si hay alguna duda solo hay que ver la evolución de las inversiones exteriores en los últimos años.
Liderar el cambio desde el acuerdo y el compromiso es el principal reto al que se enfrenta la Región. Y este corresponde a los partidos políticos y al Gobierno de la región, para poder aprovechar todo su potencial de desarrollo con medios y singularmente con la eliminación de burocracia, desde el silencio administrativo positivo hasta el apoyo fiscal para la atracción de nuevos inversores, a la vez que incentivando el desarrollo de las actividades en las que somos líderes.
