MURCIA. Ha tenido lugar en la mañana de este lunes la primera reunión del Grupo de Trabajo de Planificación Hidrológica convocada en la Consejería de Agricultura. En concreto, se trata de un equipo de expertos creado para "prestar asistencia técnica en diferentes aspectos relativos a la planificación hidrológica que servirán a la Comunidad para completar las alegaciones, en las que ya se trabaja, al Plan del Tajo", de acuerdo con Antonio Luengo, consejero de Agricultura.
En concreto, se trata de un grupo compuesto por especialistas de seis universidades provenientes de cuatro comunidades autónomas distintas con el objetivo de analizar la planificación hídrica de la Región de Murcia y todas aquellas que tengan incidencia en nuestra Comunidad.
"Queremos contar con la experiencia y el saber de aquellos profesionales de reconocido prestigio y honradez intelectual, lo que nos ayudará a estudiar y argumentar las negativas consecuencias derivadas de la escasez hídrica que sufre la Región de Murcia", añadió Luengo.
Todo ello, ante la inminente aprobación del Decreto que modificará las reglas de explotación, reduciendo a 27 hectómetros las transferencias de agua en nivel 2, por los 38 hectómetros actuales.
Integrantes y áreas de trabajo
El Grupo de Trabajo de Planificación Hidrológica está compuesto inicialmente por representantes de seis universidades de cuatro comunidades (Universidad de Murcia, Universidad Politécnica de Cartagena, Universidad Católica de Murcia, Universidad de Alicante, Universidad Politécnica de Madrid y Universidad de La Rioja), el Instituto Euro Mediterráneo del Agua, el Imida o el Instituto Geológico y Minero de España.
Así, en la reunión de hoy participaron Francisco Cabezas, Teresa Navarro, Alejandro Pérez Pastor, Javier Senent, Joaquín Melgarejo, Antonio Fanlo, Luis Garrote, Victoriano Martínez, José Daniel Buendía, José María Gómez, José Luis García Aróstegui, Javier Gilabert y José Manuel Conesa.
Para facilitar su labor, se han determinado cuatro áreas de trabajo prioritarias: la situación de los caudales ecológicos; la hidrología actual y la futura de la cabecera del Tajo; el impacto de todo ello sobre la operatividad del trasvase; y la evaluación de algunos efectos fundamentales sobre la cuenca del Segura como son régimen previsto de sustituciones y conexiones de las desaladoras, efectos medioambientales esperables, situación de los acuíferos sobreexplotados, Memorándum Tajo-Segura y sus reglas de explotación, y costes resultantes de las alternativas previstas.