La caída de los servicios impulsa el comercio como actividad favorita entre los emprendedores murcianos

MURCIA. La lucha por mantener la creación de empresas pese a la tormenta que generó la covid provocó un cambio en las reglas del juego que afectó negativamente a los nuevos comercios. Así se desprende del informe GEM 2020-2021 presentado por la Universidad de Murcia sobre la situación del emprendimiento en la Región, pues especifica un descenso de hasta el 28,8% en la tasa de actividad emprendedora.

De acuerdo con estos datos, 4 de cada 100 personas se encontraban involucradas en actividades emprendedoras, es decir, el 3,7%, una cifra considerablemente inferior al  5,2% que registró la media nacional. En cualquier caso, aún más significativo resulta el porcentaje de nuevos emprendedores, que ha pasado del 3,1% en 2019 al 2,4% en 2020.

No obstante, no solo disminuyó la cantidad de aperturas sino que estas tuvieron que adaptarse a las nuevas necesidades del entorno, por lo que el tipo de negocio también pasó a verse afectado. En específico, el consumo ha sido el sector más beneficiado con un crecimiento de un 10% hasta el 58,5% del total de nuevos proyectos, mientras que los servicios reducen un 13% su proporción hasta el 20,9% del total. Por otro lado, aquellas empresas dedicadas a transformar los productos repuntaron hasta el 17,8%, mientras que las dedicadas a la extracción se estancaron en el 2,9%.

Perfil de los emprendedores en la Región

En cuanto al perfil de las personas que deciden iniciar un negocio en la Región, la edad media queda situada en los 40,2 años, un resultado ligeramente inferior al del conjunto de España. También destaca la proporción de emprendedores con estudios superiores, pues aumenta en un 10% desde el año anterior pese a que el 37% aún asegura no haber recibido ninguna formación específica para desarrollar su propia empresa.

Sin embargo, aún más llamativo resulta la distinción por género, pues las mujeres no solo emprenden menos que los hombres sino que que aquellas ya involucradas en el proceso de desarrollar un negocio perciben que tienen menos habilidades para emprender con 20 puntos de diferencia sobre los hombres (69% frente a 88%) y se muestran más pesimistas respecto a las oportunidades con una diferencia de casi 30 puntos (3,2% frente a 29,5%). No obstante, se muestran más confiadas ante el miedo al fracaso.

Otro de los puntos clave del documento es la motivación de los murcianos para lanzarse a montar un negocio, pues de acuerdo con estos datos un 70,7% de las iniciativas nacen de la necesidad de ganarse la vida ante la escasez de otras alternativas, mientras que solo 43,4% lo hacen para conseguir riqueza o una renta muy alta.

No obstante, y a pesar del clima de miedo esparcido entre el 66,9% de los murcianos, también resulta destacado que uno de cada dos habitantes de la Región considera que tiene habilidades suficientes como para montar su propio negocio.

También la financiación se ha visto afectada por esta crisis, de forma que el capital semilla para la puesta en marcha de negocios demandado en el 2020 ha quedado fijado en 43.582 euros de promedio frente a los 51.518 de 2019. Asimismo, aunque los ahorros personales continúan como la principal fuente de financiación estando presentes en el 53,9% de los casos destaca el aumento más de 10 puntos en la presencia de las instituciones financieras llegando a alcanzar el 33,5% de los nuevos proyectos. Por su parte, la inversión privada se mantiene en el 3,5%.

En cuanto al contexto en el que se desarrolla la actividad emprendedora en la Región, este estudio señala el clima económico, el limitado apoyo financiero y las políticas gubernamentales como los principales obstáculos a la hora de poner en marcha un negocio. Por el contrario, los principales factores de apoyo resultarían los programas de los distintos gobiernos, la capacidad emprendedora y el acceso a la infraestructura física.