MURCIA. Con motivo de su exposición titulada De la madera al grabado, en el Museo Arqueológico Los Baños, en Alhama de Murcia, que permanecerá abierta al público hasta el 27 de marzo, entrevisto a Juan Pedro Esteban Nicolás, casado con Caridad Marín, maestra, con la que lleva 37 años compartiendo su vida. Son padres de 3 hijos: Pablo, que también ha tomado el camino del arte y es creador de muñecos de autor; Irene, maestra como su madre; y Marina, que también ha apostado por una carrera artística y quiere ser directora de cine. De su extenso currículum me quedo con su colaboración en el Proyecto Educativo de Atención al Alumnado en Aulas Hospitalarias de Técnicas de Pintura y Modelado en el Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca, lo que me dice que por encima del artista, está un ser humano extraordinario.
Juan Pedro, muchas gracias por invitarme a conocerle como persona y como artista. Háblenos un poco sobre usted.
Nací en 1959 en Cartagena, en el Barrio Peral. Estudié Delineación en el Politécnico de esta misma ciudad, en la antigua escuela de Maestría Industrial. Mi primer maestro fue Rafael Eleuterio, decorador y tallista. Paralelamente tomé clases de guitarra flamenca con Antonio Piñana y clases de dibujo y pintura con el pintor Juan de la Cruz Teruel y con el escultor Manuel Ardil Pagán. Trabajé como diseñador para grandes superficies de moda y alimentación. He realizado numerosas exposiciones dentro y fuera de España. Fundé junto con José Antonio López Palazón, y Pedro José García Andreo el grupo + Formas de escultura, participando en la Noche de los Museos en Cartagena y Murcia. He realizado numerosos murales de pintura y cerámica y he sido profesor de la escuela taller de La Milagrosa en Cartagena, del grupo Pigmentos de Fuente Álamo, del centro de mayores de Mazarrón y del grupo Shaked de Perín en Cartagena. He realizado ilustraciones para ediciones de la Torre y he recibido numerosos premios de pintura y escultura, entre ellos, el concurso Murcia Joven, junto con Ángel Haro.
¿Por qué no compramos de vez en cuando arte original en lugar de litografías u objetos fabricados?
El problema no es sólo de un sector social particular. Lo es la información que recibimos respecto a la compra de arte, como puede ser cuando salen estas galerías famosas ofreciendo cuadros de Picasso o de Banksy por una cantidad importante de dinero. Lo que hacen es separarnos más que acercarnos al arte; nos lo ponen en una montaña como si no pudiese la gente acceder a esa compra. La tendencia al consumo de arte está un poco supeditada a la crisis financiera, al momento político-histórico, pero otro inconveniente es el desconocimiento que hay del artista y la distancia entre la necesidad que tiene el público con lo que el artista en cada momento es capaz de crear.
Me viene a la mente una talla suya donde plasma a una mujer embarazada rodeando su vientre con la mano. Siguiendo su reflexión, ¿un comprador ad hoc sería por ejemplo un/a ginecólogo para decorar su consulta o una clínica de fertilidad? ¿Nos pondría algún otro ejemplo?
He trabajado mucho por encargo, sobre todo retratos. Pero las obras que hay en esta exposición, no responden a unos clientes concretos, son procesos de investigación.
¿Cómo logra el resultado final que no es otro que la creación de sus obras?
Solamente si estás en un ambiente adecuado, puedes tener esa concentración para trabajar de manera consciente y responsable.
¿En qué proyecto trabaja actualmente?
Ahora mismo estoy preparando otra exposición de óleos y acuarelas sobre temática de aquí del pueblo, de Moratalla. Me encanta la zona; tiene lo que buscaba: aire limpio y silencio, muy necesario para crear. Lo voy combinando con otro tipo de proyectos porque aparte de ser pintor y escultor, he trabajado mucho tiempo en decoración.
Me comentaba al inicio de la charla que no suele salir más allá de las paredes de su estudio. ¿Se le podría definir como un ermitaño del arte?
Se puede entender como si fuese un “encierro” o un trabajo de ermitaño pero esto realmente no es así, es que es necesario. Ya bastante tiempo se pierde en trabajar para comer. Últimamente tengo la sensación que cuanto más tiempo dediques a pensar el cómo hacer un proyecto, más positivo va a ser el resultado. Ya no es crear por crear sino llegar a un punto en el que verdaderamente te haga crecer como artista, no sólo producir barato o caro, sino de forma responsable.
¿Por qué eligió Moratalla como zona de trabajo?
Por motivos familiares. Es un sitio donde yo puedo seguir atendiendo a mi familia y al mismo tiempo tengo un cierto aislamiento que para mí es muy necesario.
¿Está satisfecho de su trabajo como artista?
Cierto es que he tenido mucha suerte porque he vendido bastantes obras. Probablemente el que quiere encontrar una creación tuya al final te localiza de mil maneras, y además siempre he tenido buenos amigos que me han estado apoyando.
¿Qué técnicas pictóricas-escultóricas suele utilizar?
Comentaba el día de la inauguración de la exposición en los Baños que no era bueno someterse a una disciplina y quedarse limitado en ella. Los grandes maestros siempre han estado investigando y no es porque yo también pretenda ser uno de ellos, sino porque simplemente me aburro, no puedo estar haciendo siempre grabados, no puedo estar haciendo siempre talla de piedra, acuarela... Es bueno que el artista, con una edad de no principiante esté siempre investigando, porque eso es lo que te lleva a avanzar. El artista que cree que ya lo sabe todo, que se conforma con un objetivo, pues yo creo que no es positivo ni para él ni para su entorno, amigos y sobre todo para su obra.
¿Ha tenido momentos de “bajón creativo”?
No, porque son en esos momentos donde más seguro me siento para crear.
¿Va a traer pronto a Murcia capital alguna exposición suya?
Pues precisamente ando buscando un local o sala de exposiciones que quiera recibir mi obra. A ver si encuentro ese apoyo cultural por parte de las entidades públicas y os acerco varias de mis creaciones allí.
(Fotos cedidas por Juan Pedro Esteban Nicolás)