Los estudios económicos realizados evidencian que los márgenes brutos de la explotación se incrementan con la diversificación de cultivos
CARTAGENA. Habas, judías, cebada, veza y verdolaga crecen por primera vez entre mandarinos en una finca del Cabezo de la Plata, en el municipio de Murcia. Estas plantaciones experimentales, que comenzaron en 2018, se realizan a través del proyecto europeo Diverfarming, liderado por la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT). El objetivo principal es la mejora de la sostenibilidad ambiental, económica y social de la actividad agrícola.
Los primeros resultados del proyecto, que finaliza en 2022, ya evidencian otras ventajas añadidas a la sostenibilidad ambiental. Entre ellas, el incremento de la productividad de la finca gracias al cultivo alternativo de otras plantas que diversifican la producción del agricultor. A su vez se traducen en la venta de nuevos productos en el mismo terreno en el que hasta ahora sólo se plantaban cítricos, explica Raúl Zornoza, investigador responsable.
Otra de las ventajas que resalta el profesor, del área de Edafología y Química Agrícola de la UPCT, es que se está reduciendo el impacto ambiental. "Cultivamos en las calles de la finca, en los espacios de tierra que hay entre el arbolado y, por tanto, estas plantas reducen la erosión y mejoran la fertilidad y porosidad del suelo", agrega.
"Hemos diversificado los mandarinos con cultivos anuales en las calles, plantando habas, verdolaga, judías y forraje como cebada y veza", indica el investigador. Habas, verdolaga y judías se venden para consumo humano y la cebada y la veza, para alimentación animal.
Además "los nuevos cultivos atraen insectos beneficiosos que pueden contribuir a reducir la incidencia de plagas, reduciendo a medio-largo plazo el uso de pesticidas", añade Zornoza.
Los estudios económicos realizados evidencian que los márgenes brutos de la explotación se incrementan con la diversificación de cultivos.
La rentabilidad económica de la diversificación es esencial para que los agricultores adopten estas prácticas que reducen el uso de fertilizantes y regeneran los suelos. Por ello, los investigadores coordinados por la UPCT recomiendan a la Comisión Europea que introduzca en la Política Agraria Común incentivos y ayudas para fomentar estas técnicas de agricultura sostenible.
Los ensayos se realizan en la Finca Canteras, de la empresa agrícola Ferbal, cuya sede central se encuentra en Madrid.
Diverfarming es un proyecto financiado por el Programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea, dentro del reto de ‘Seguridad alimentaria, agricultura y silvicultura sostenibles, investigación marina, marítima y de aguas interiores y bioeconomía' (Referencia728003). Diverfarming está coordinado por la UPCT y en él participan 25 socios internacionales, entre universidades, centros de investigación, empresas y asociaciones agrarias de ocho países.
Este proyecto, a su vez, se enmarca en los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) 12 (Producción y Consumo responsables), 13 (Acción por el clima) ,15 (Vida de ecosistemas terrestres) y 17 (Alianzas para lograr los objetivos). A la vez es un ejemplo de Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN).