Foto: OMEGA.MURCIA. El Corredor Mediterráneo sigue, a cada día que pasa, más cerca de convertirse en una realidad. Y es que el gran proyecto ferroviario que puede marcar un antes y un después para la capacidad de transporte de la Región está ahora completando las últimas adjudicaciones, como es el caso de la consultoría y asistencia técnica para controlar las obras entre Murcia y Lorca.
Este servicio será llevado a cabo por la unión temporal de empresas (UTE) formada por la madrileña Grusamar Ingeniería y Consulting y la albaceteña Electrificación y Estudios Ferroviarios (E2F), que llevarán a cabo estos trabajos durante los próximos 3 años por una remuneración total de 1,68 millones de euros.
Esta UTE se ha impuesto a sus cuatro competidoras al alcanzar la mayor puntuación tanto en el apartado técnico como en el económico, que representaban cada una el 49% de la nota final, mientas que la experiencia y el equipo completaban la calificación. En concreto, obtuvo una suma de 99,13 puntos sobre los 100 posibles, muy por encima de los 90,39 de la segunda oferta mejor valorada.
En concreto, Grusamar y E2F estarán encargadas de dar apoyo al director de obra en el control técnico y seguimiento económico de las obras según las condiciones de calidad, ambientales y de seguridad establecidas en la normativa vigente, así como por la propia Adif.
Este tramo incluye siete estaciones y seis trayectos para conectarlas. Así, la supervisión de la obra abarcará las terminales de Murcia, Alcantarilla, Librilla, Alhama, Totana, La Hoya y Lorca, así como los trabajos para la colocación y electrificación de las vías entre ellas. En total, quedan comprendidos 62 kilómetros.
La resolución de esta licitación llega tan solo una semana después de que se adjudicasen los trabajos de electrificación de este tramo, una labor de 38,5 millones de euros que queda en manos de la UTE integrada por Electren, Elecnor y Syneox Rail. También en este mes de diciembre quedaron establecidos los encargados de poner en marcha el telemando de energía, la UTE System y Mytra por 3,8 millones de euros.
En su conjunto la Línea de Alta Velocidad Murcia-Almería, integrada en el Corredor Mediterráneo, supone una inversión de 3.500 millones de euros. En la actualidad, junto a la mencionada electrificación, Adif aborda los proyectos de tendido de las vías en la línea; la construcción de la plataforma, que tiene todos sus tramos en marcha (finalizados, en construcción o bajo contratación); y en el proyecto de la conexión Pulpí-Águilas.
Asimismo, acaba de poner en marcha las obras complementarias en el tramo Sangonera-Totana (15 kilómetros) para homogeneizar trazados de la plataforma. Para ello, se acondicionarán taludes, se instalarán nuevos cerramientos y barreras de contención en pasos superiores, cerramientos antivandálicos y nuevas conducciones, entre otros trabajos.
