MURCIA. "Nací dos veces. Miento, tres. La primera fue en un teatro. La segunda, en un autobús. La tercera, la oficial, donde no quise nacer". Así comienza Gracias por mi vida, el emotivo retrato de una familia de artistas escrito por el director de cine, guionista y escritor Benito Rabal, hijo de los actores Paco Rabal y Asunción Balaguer; un libro que se convierte en un recorrido por la Historia de España del siglo XX por el que desfilan personalidades como Luis Buñuel, Orson Welles, Pablo Picasso, Rafael Alberti, Juan Antonio Bardem, Carlos Saura, Mario Camus, Miguel Delibes, Fernando Rey, Fernando Fernán Gómez… y muchos otros protagonistas del mundo de la cultura y de la política con los que se codearon los Rabal.
Con el primero de estos tres nacimientos se refiere Benito Rabal a cuando sus padres se conocieron en el teatro, él procedente de una familia humilde, intentanto abrirse camino como actor, y ella una señorita de la burguesía, bella y educada, cuyo nombre ya sonaba en los círculos teatrales. "Y ahí, en la mirada enamorada de mi padre, empecé a nacer", escribe en este libro que se ha gestado en Águilas, la tierra natal de esta familia de artistas.
Lo ha hecho, escribir estas memorias, con una foto de sus padres abrazados presidiendo el lugar donde trabaja. "Ahora, según me acerco a la edad en que mi padre se fue, a veces me sorprendo al mirarme al espejo y no reconocerme a mí, sino a él. También al contemplarme las manos o descubrirme en un gesto. Lo mismo me pasa con mi madre. Siguen estando a mi lado", reflexiona.
A lo largo de la obra, Benito Rabal cuenta numerosas historias y anécdotas de su familia. Como cuando su madre, ya en el hospital, les llamó por primera vez "mis morenitos", mostrándose "orgullosa de nuestra herencia del sur", ya que tanto él como su hermana Teresa tenían el pelo negro frente a la familia materna en la que abundaban los rubios. También recuerda como Asunción Balaguer siempre necesitó sentirse actriz y estar en el meollo de Madrid, aunque ya habiendo cumplido los noventa solía repetir: "Cuando sea mayor a lo mejor me voy a vivir a Águilas".
Gracias por mi vida no es sólo un homenaje a sus padres, sino también al cine y el teatro. Así, por ejemplo, Rabal Balaguer -también padre del actor Liberto Rabal- explica cómo surgió su vocación: "Seguramente fue por ver la actuación de mi padre que asistí a la proyección de la película aún sin terminar de montar. Los paisajes, los movimientos de cámara, el duelo interpretativo, la manera de desarrollar el argumento, fueron para mí una revelación. Algo se revolvió en mi interior, no sé explicar muy bien por qué. De repente, me sentía como el explorador decimonónico que descubre una ciudad perdida en lo más profundo de la jungla. La misma luz que alumbra el camino de los místicos, se me apareció para desvelar mi vocación. Nada más salir de la sala, me encaré a mi padre: Yo quiero hacer lo mismo, contar historias así, con el cine. Quiero ser director".
El escritor relata todos esos episodios que han conformado "mi herencia, el regalo de su legado, los sólidos cimientos sobre los que he intentado construir mi vida". "Crecer bajo la bandera del amor, junto a dos personas que han roto su destino te enseña a ver el mundo de otra manera. Entiendes que la vida no consiste en una carrera de fondo en la que cumplir metas que te lleven a una futura felicidad, sino procurar que esta se encuentre presente en cada momento", asegura.
Benito Rabal trabajó como ayudante de dirección y director de segunda unidad con varios de los mejores directores nacionales y extranjeros en películas como Los santos inocentes, El crack, Volver a empezar, La colmena, Las bicicletas son para el verano, Sorcerer o La fuga de Segovia. Entre sus trabajos como director cabe destacar El hermano bastardo de dios, El furgón, Nazca, Paco, mi padre, Curro Jiménez II, Francisco por Paco o los cortometrajes Mereces vivir y Tú verás. En Gracias por mi vida hace memoria de su vida personal y su carrera cinematográfica, a las que en los últimos años ha añadido su faceta como escritor, con el poemario Notas del sur y la novela Ayer, mañana.