MURCIA. La Región de Murcia ha iniciado la maquinaria para poner en marcha un sistema inteligente de transporte (ITS). Para ello, dio comienzo en el pasado verano a una licitación con la que buscaba una empresa que se hiciera cargo de su instalación, una búsqueda que ahora esta cercana a resolverse con la preadjudicación a GMW Sistemas, una compañía madrileña experta en este tipo de servicios.
La Comunidad ha considerado que esta firma era la mejor valorada al obtener 90,5 puntos de los 100 posibles, superando así los 73 obtenidos por su única competidora en el concurso, Revenga Ingenieros. Para alzarse vencedora, la oferta económica ha resultado un factor clave, pues ha sido el componente diferencial para GMV ya que se había quedado ligeramente por debajo en cuanto a los criterios evaluables mediante juicios de valor.
Así pues, una vez acreditado que cuenta con la solvencia económica y técnica suficiente para llevar a cabo los trabajos, la Mesa de Contratación ha acordado proponer a GMV para la adjudicación, por lo que la mercantil recibirá 3,7 millones de euros con impuestos incluidos.
En concreto, estará encargada del suministro, instalación, integración y puesta en marcha del Sistema Central de Gestión ITS de la Comunidad (SCREM), así como de los distintos componentes ITS de los operadores de transporte por carretera y sistemas de información al viajero en parada. Esta empresa contará con 48 meses para realizar estos trabajos, es decir, que su labor se alargará durante 4 años.
Por tanto, llevará a cabo el suministro de los equipos embarcados en los autobuses para validación y venta, equipos del SAE y equipos del SIV, al igual que el suministro de los equipos en calle para autoventa y recarga y el suministro de los equipos necesarios para instalación de un Sistema Central del Operador (SCO) de nivel 3 del operador del transporte.
De esta forma el resultado de este contrato debe ser la renovación tecnológica del equipamiento embarcado del servicio de autobús de la región de Murcia, considerándolo como un todo, una solución integral con independencia del origen de los diferentes servicios, con un protocolo de comunicaciones con posibilidad de escalabilidad y de crecimiento a futuro con terceros proveedores. A ser posible debe estar basado en estándares europeos y ser capaz de incorporar nuevas tecnologías y aplicaciones en un futuro.
Cabe recordar que GMV no es ajena a este tipo de servicios, pues es una de las áreas de especialización de esta compañía que suma ya más de 3.000 trabajadores, más de 300 millones de facturación y presencia en 80 países. De hecho, esta firma madrileña acaba de adjudicarse el contrato para el nuevo sistema central de gestión ITS de Castilla y León.
