Flavio: "Ahora tengo más claro lo que quiero y el sonido que quiero conseguir"

MADRID. Nació profesionalmente en plena pandemia y, tras dos años en la industria, se aprecia que Flavio, segundo en la edición de Operación Triunfo 2020, ha encontrado el camino que quiere seguir. Tiene un discurso más formado tras pasar de niño a adulto en un corto periodo de tiempo. Con su último single, Quiero que seas feliz , muestra un adelanto de lo que será su segundo disco de estudio. 

Han pasado casi dos años desde que saliste de la Academia de Operación Triunfo. ¿Logra uno asimilar todo lo que le ha pasado en este tiempo?

Sí, por suerte todo ha ido muy bien hasta ahora. Tanto los conciertos, como el disco, el nuevo proyecto que estoy empezando…Estoy muy contento por como va todo y muy agradecido de que la gente esté apoyando lo que hago.

¿Cómo es promocionar todo tu trabajo en plena pandemia?

Pude hacer una serie de conciertos, menos de lo que hubiera querido, pero contento. Todos pudieron celebrarse, no se tuvo que cancelar ninguno. Y ahora ya ultimando algunos que vienen dentro de poco. 

Tu último sencillo es Quiero que seas feliz. Te he leído que se te da bien escribir sobre desamor. ¿Es más fácil encontrar inspiración desde ese sentimiento de tristeza o cuando estás enamorado, más feliz?

No estoy seguro. Ahora mismo estoy enamorado, pero creo que todos, de alguna forma, empatizamos más con una canción de desamor. Me resulta más fácil en ese sentido componer sobre desamor.

¿En qué sientes que has cambiado desde que eres artista profesional?

Si me comparo con el Flavio que sacó su primer sencillo, Yo con yo mismo, conozco más y sé mejor de que va la industria, lo que se mueve por dentro, las relaciones con otros artistas…Soy más organizado, tengo más claro lo que quiero y el sonido que quiero conseguir; sobre todo he cambiado a mejor.

Con tu edad normalmente no estás trabajando, sino estudiando o preparándote para algún empleo. ¿Te ha costado asumir la responsabilidad de ser profesional tan de golpe?

Sí, al fin y al cabo, es un trabajo más. Para comer tienes que trabajar y tiene sus obligaciones. Hay que ser consciente de ellas y, si un viernes no puedes salir a tomar una cerveza, pues no puedes salir. En ese sentido, me he vuelto adulto de la noche a la mañana como quien dice. Si que es verdad que sigo con mis estudios de piano. Las obligaciones se duplican pero lo llevo bastante bien.

Dentro de la Academia de Operación Triunfo, antes de la primera firma de discos, Noemí Galera os dijo: “Recordad que es muy posible que esto no lo volváis a vivir nunca”. ¿Te han tenido que bajar a la tierra en algún momento?

Tengo suerte de que a mi alrededor tengo gente que, todo lo que me dicen, siempre es de forma constructiva. Siempre que notan algo que cambia en mí me recuerdan que sigo siendo el mismo de antes.

Eso viene bien porque, cuando ocurre todo tan rápido, puedes perder perspectiva de lo que debes hacer para seguir viviendo de la música.

 Hay que tener un equilibrio. Tienes que disfrutar lo que estás viviendo porque es un sueño para ti. Por otro lado, debes ser consciente de que por muchas cosas buenas que te estén pasando no puedes perder el norte. 

Decía Alejandro Sanz que, conforme han pasado los años, ha tendido a cerrar más su círculo de amistades. ¿Te ha pasado algo parecido desde que saliste de OT?

Sigo teniendo los mismos amigos de antes. Cuando voy a Murcia me rodeo de las mismas personas que antes de OT. Aquí en Madrid, tanto con mis compañeros de OT como con otra gente que conozco no suelo cerrarme a nadie.

¿Sientes un cierto sentimiento de sacrificio, como de renunciar a algo, por haber empezado tan temprano a trabajar?

De alguna forma sí. En mi mente, desde hace muchos años, desde mi cambio a grado medio en el conservatorio, mi mentalidad siempre fue ser profesor de piano y llegar a eso pasara lo que pasara. Se pusieron delante de mí muchas expectativas, porque destacaba, y, por ese lado, sí siento que de alguna manera he defraudado a ese Flavio que tenía ese pensamiento. He perdido muchas cosas y he ganado otras. Hay que hacer un balance siempre positivo de lo que me está pasando.

¿Cómo te has adaptado a Madrid?

Muy bien. Desde un primer momento he estado cómodo. Comparto piso con mi novia, Samantha. No me he sentido mal en ningún momento, no he querido volver. La independencia ha ido muy bien la verdad.

¿Cuándo está previsto que salga el disco? ¿En qué se va a diferenciar del primero?

No estoy seguro. Primero vamos a ir sacando sencillos. Espero que a final de año. Este trabajo va a estar más organizado. Todas las canciones van a tener más relación entre sí, tanto a nivel sonoro como de estilo. Quiero que sean todas con banda orgánica, con referencias a ColdPlay, Harry Styles, Imagine Dragons… Este trabajo va a estar formado por pequeñas partes de un todo común.

Hay un cambio en la forma de promoción de los artistas respecto a hace diez años. Ahora se publican single a single y ya después se sacar el disco. Antes era al revés, se sacaba uno o dos sencillos y, después, el resto del álbum. ¿Qué forma de promoción te gusta más?

Me gusta la idea de que todas las canciones tengan relación entre sí. El hecho de sacar tema a tema como ahora me parece algo positivo. Es lo que se hace hoy en día. Hace poco vi un vídeo que decía que, si tú sacas un álbum, una canción se puede pitchear (colocar tus canciones en listas de reproducción) por todas las plataformas, mientras que con el resto del álbum no lo hace. Entonces, si vas canción a canción, te aseguras de que el tema llegue a más gente.