CARTAGENA (EFE). Los escritores finalistas del Premio Mandarache de literatura juvenil, que será fallado la próxima semana por más de 7.000 de jóvenes, mayoritariamente estudiantes de Bachillerato, han coincidido en señalar lo "increíble" de esta iniciativa, generadora de una gran "energía lectora". "Tendría que haber una Cartagena en cada ciudad de España porque esto debería ser el ejemplo a seguir", ha resumido Yolanda García Serrano quien, junto a Juan Carlos Rubio, compiten con la obra Música para Hitler.
Para García Serrano, "que gente tan joven se preocupe por leer me parece que es lo uno espera siempre cuando se dedica a escribir", a lo que Rubio ha añadido que "Cartagena solo hay una, pero ojalá que se pudiera trasladar a muchos otros sitios este proyecto, porque es fabuloso para los jóvenes y para los autores que pasamos por aquí".
Javier Olivares, autor de La guerra de los mundos y que ya conocía la ciudad por otros certámenes sobre comic y novela negra, ha comentado que "lo bonito de este premio es que tiene a los chavales como jurado, porque no solo son los lectores del futuro, sino porque sientes que no hay intermediarios, que tu nombre no significa nada, que no te conocen y no son tus amigos". "Es gente a la que le gusta de verdad a tu trabajo, tu obra, y esa sinceridad me parece un regalo para nosotros", ha subrayado.
Para la autora de Supersaurio, Meryem El Mehdati, es "una iniciativa súper bonita" que "impulsa a la lectura a gente muy joven y que empieza a leer porque le gusta, no porque tiene una serie de libre pautados por los profesores que a lo mejor no consiguen conectar con ellos, y eso me parece maravilloso".
Los cuatro finalistas de los Premios Mandarache han participado este jueves en un encuentro al que han asistido cerca de 1.500 estudiantes, celebrado en el Auditorio El Batel, y que ha contado también con la presencia de la alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, y el concejal de Juventud, José Martínez.
Arroyo ha valorado que "los Premios Mandarache y Hache se han convertido en la iniciativa cultural y de juventud más importante de Cartagena, logrando la participación de 7.000 jóvenes, involucrando también a chavales de otras Cartagenas, las de Chile y Colombia".
Para la regidora, este programa de fomento de la lectura tiene recorrido asegurado para el futuro. De hecho, el Ayuntamiento aumentó el presupuesto en 2023 un 72%, teniendo en la actualidad una financiación anual de cerca de 160.000 euros.
El ganador del Premio Mandarache se conocerá tras las votaciones que tendrán lugar del 15 al 19 de abril. Decidirán con su voto multitud de jóvenes, de entre 15 y 30 años. Éstos forman parte del masivo jurado en el que participan lectores de todo el mundo, destacando la presencia de gente de Cartagena (España), Cartagena de Indias (Colombia) y Cartagena (Chile).
Tras el encuentro con los escritores, la jornada ha continuado durante toda la mañana junto al mar Mediterráneo en la explanada del Auditorio. Allí se ha celebrado una feria de actividades literarias con carpas para las firmas de libros, la grabación de un ‘podcast’ en directo, un ‘videocall 360 grados’ y más actividades.
Ayer miércoles fue el día de los Premios Hache, la otra iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Cartagena que se desarrolla a la par que los Premios Mandarache, pero dirigida a alumnos de Secundaria.
Más de 1.400 estudiantes de 12 a 14 años se congregaron, también en El Batel, para tener un encuentro literario con los tres finalistas de los Premios Hache -Mónica Rodríguez, Paloma Muiña y Darío Adanti-, quienes hablaron sobre sus obras Jeans, El meteorito somos nosotros y Se buscan héroes, respectivamente.