Esther Guzmán y Marisol García, la nueva fórmula de hacer política de MC más allá del cartagenerismo

CARTAGENA. Esther Guzmán Linares (Cartagena, 1978) y Marisol García (Barcelona, 1987) se han convertido la nueva imagen de Movimiento Ciudadano allende las tierras portuarias. Ambas han llegado al partido liderado por José López recientemente, sin un recorrido político a sus espaldas que les pese, por lo que aparecen sin los habituales vicios de la profesión y con la frescura de los noveles para una campaña que se presenta muy interesante.

Si sorprendente ha sido lo de Esther Guzmán, no se queda atrás el caso de Marisol García, ya que fuera del propio ámbito del partido, nadie nos podíamos imaginar que una penalista que hacía sus 'incursiones' reivindicativas en su diputación, La Aljorra, y una joven empresaria, quien peleaba para dar impulso a los nuevos emprendedores desde AJE Cartagena, saltaran al 'ruedo' de esta manera, mostrando a los electores que puede haber otra fórmula de hacer política desde otros foros y con otro discurso novedoso y actual.

Esther Guzmán, un mensaje nuevo con la biprovincialidad camino de la Asamblea

A Esther la definen aquellos que la conocen, como una de las abogadas más brillantes en la Región y aseguran que su implicación en los diferentes colectivos sociales con los que ha trabajado a lo largo de esos años, le ha ayudado a ver que desde el atril de la Asamblea Regional -si es que, finalmente lo lograra- se puede y se debe hacer más por los ciudadanos. Afirman que transmite ilusión, capacidad, valía y entusiasmo, y ese punto de 'buen rollo' que todo político necesita para convencer sin provocar. Por eso añaden que, sin dejar de ser vehemente, está plenamente convencida de lo que quiere y que tiene la capacidad plena para hacérselo saber a aquéllos que la escuchan.

Durante su presentación como candidata mostró un entusiasmo pleno por un proyecto "de grupo", con el que tratará de mostrar en la Asamblea la que considera "justicia e igualdad" para todos los municipios de la Comunidad Autónoma, no solo para los de su ciudad. Recordó Esther que si logra estar en la próxima Legislatura en la Asamblea trabajará en el desarrollo de leyes como la comarcalización, así como el propio Estatuto, incidiendo en que "es necesario hablar de la biprovincialidad".

Eso sí, el reto es mayúsculo, tal y como saben desde su propio partido. Las cuentas para llegar hasta ahí no son fáciles. El partido cree a pies juntillas en un importante crecimiento en las Municipales por Cartagena, pero ahora falta saber encauzar a ese votante, para que haga lo propio en la papeleta a la Asamblea Regional. Si a eso le pueden añadir el caladero de votos que podría llegar desde MC La Unión, las cuentas podrían alcanzar hasta los dos diputados en el edificio de Alfonso XIII. Eso sí, para conseguirlo necesitan sobrepasar los 30.000 votos y recordemos que en las elecciones de 2019, MC Cartagena se quedó a las puertas, pero con 14.742 votos no es suficiente para lograr el primero de sus objetivos.

Marisol García y ese inconformismo que le ha hecho dar un giro a su vida

Marisol García ha aterrizado en esta nueva experiencia en su pueblo con la seguridad de estar en el que considera "el camino correcto". Está convencida que si tenía que dar en algún momento el paso hacia la política, MC era el lugar propicio. Comparte sus principios de "honestidad y honradez y también sus valores de justicia y de servicio público. Es un proyecto en el que creo y del que estoy muy orgullosa. De otra forma no habría valorado mi incorporación", explica.

Y es que la candidata de MC a la Alcaldía de La Unión cree que los partidos tradicionales actúan por inercia, sin programa ni planificación, de ahí que haya trabajado con su equipo en un proyecto de municipios que les guíe en su objetivo de mejorar la vida de la gente que vive en La Unión.  

Se define como una persona "inquieta" y también con ese punto de inconformismo, necesario para aportar soluciones cuando ve que algo no funciona. "No me gusta ver día a día, cómo la ciudad en el que vivo y en la que me he criado se apaga lentamente. Me niego a conformarme y a vivir en un lugar en el que los jóvenes no tienen futuro. Y cuando te das cuenta de que el futuro no va a mejorar por sí solo, y de que tampoco lo están mejorando los que nos gobiernan, entiendes que no te queda otra que reunir el valor suficiente para intentarlo", subraya.

Cree Marisol García que el hecho de que sean dos mujeres las que lideren estos dos proyectos "no es más que un fiel reflejo de la realidad de hoy en día en la que cada vez las mujeres tomamos más protagonismo en la vida pública y en los puestos de dirección y liderazgo".