MURCIA. La Consejería de Educación y los sindicatos representados en la Mesa Sectorial de Educación se han reunido este lunes en sesión ordinaria para agilizar los trámites relativos a la publicación de la próxima convocatoria de oposiciones al Cuerpo de Maestros.
En la reunión, presidida por la consejera María Isabel Campuzano, se negoció la oferta de empleo público docente para 2022, adelantándola así a la oferta global que se elabora anualmente, con objeto de poder incorporar 466 plazas de maestros al proceso de oposición, logrando una oferta total de 905 plazas por las que competirán los opositores. Estas plazas proceden netamente de la tasa de reposición de efectivos, incrementada en un 20%, máximo permitido por los Presupuestos Generales del Estado.
En la misma sesión se ha negociado una modificación de la actual orden de bases, la norma que regula las oposiciones con carácter general y delimita el marco de las convocatorias.
Dicha modificación, de carácter técnico, consiste en el establecimiento de un baremo para las convocatorias en que solo se ofrezcan plazas de reposición, como es el caso de la actual. Se hace necesaria tal modificación por no estar contemplada esta posibilidad entre los anexos de la vigente orden de bases, de ámbito regional.
Tras el proceso de negociación y ante la falta de consenso en la Mesa Sectorial el baremo quedará configurado con 4 puntos la experiencia docente, 4 puntos la titulación académica y 2 puntos otros méritos.
La consejera agradeció a los sindicatos su “actitud de negociación” y les ofreció “un permanente diálogo para continuar trabajando en el objetivo último de poder ofrecer la mejor calidad en la enseñanza a todos los alumnos de la Región de Murcia”.
De este modo, con la celebración de esta Mesa y su posterior remisión a la Mesa General de Negociación, “queda perfectamente definido el marco de la convocatoria de oposiciones del mes de junio al Cuerpo de Maestros propuesto por la Administración Educativa”, señaló la consejera, cuyas principales características, siguiendo el modelo del año 2016, son:
- Una primera prueba con dos partes independientes: prueba práctica relacionada con la especialidad y desarrollo de un tema por escrito a elegir entre dos por sorteo) .
- Una segunda prueba consistente en la presentación y defensa de una programación didáctica y exposición oral de una unidad didáctica.
La primera prueba vale diez puntos. Para pasar a la segunda prueba (programación didáctica) hay que obtener como mínimo un 5 y al menos 1,25 en cada una de las partes.
La segunda prueba vale diez puntos y se aprueba con un mínimo de 5. La nota de la fase de la oposición es la media aritmética entre la primera prueba y la segunda.
Después se pasa a la fase de concurso y se aplica el baremo que otorgará 4 puntos a la experiencia docente, 4 puntos a la formación académica y 2 puntos para otros méritos. Por último, la nota global de la oposición se obtiene ponderando en 2/3 la nota de oposición y 1/3 la nota de concurso de méritos.
Los aspirantes seleccionados deberán superar una fase de prácticas en el curso siguiente, donde se les señalará un destino inmediato desde el 1 de septiembre relacionado con la especialidad de acceso.
Dichas prácticas se califican por una comisión con la nota de apto/no apto y, en caso de resultar negativa, se pueden repetir por una sola vez, si la Consejería otorga el permiso a la vista de la solicitud presentada por el opositor.
Desde Comisiones Obreras consideran "inaceptable la pérdida de 426 plazas de estabilización" del cuerpo de maestros de las ofertas públicas de empleo (OPE) de 2019 y 2020 que no podrán ejecutarse en la convocatoria de 2024 por haber transcurrido más de tres años desde su publicación.
Esto "invalida el acuerdo de la Mesa Sectorial del 24 de noviembre pasado", cuando el sindicato pactó con el Gobierno la OPE pensando globalmente en la reducción de la tasa de interinidad que resultará del proceso de estabilización de la ley estatal 20/2021 de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público acordada con los sindicatos para bajar su tasa del 8 % en 3 años.
Para el sindicado, la convocatoria de unas oposiciones con el sistema de acceso menos beneficioso para el profesorado interino es "especialmente grave" en un momento en el que la estabilización del empleo es crucial y "con la publicación en ciernes del modelo de acceso que ha de pilotar ese proceso".
De ser necesario, si la demora del ministerio del ramo hace inviable que la convocatoria se ajuste al nuevo modelo transitorio, propone que se realicen las oposiciones de 2022 con el régimen transitorio de 2018, lo que posibilitaría convocar plazas de estabilización de la OPE de 2019.
Sería posible convocar las 1.240 previstas en un principio con esta distribución: 426 plazas de estabilización de las OPE de 2019 y 2020, 439 de reposición de las de 2020 y 2021 y 375 de reposición de la de 2022, con lo que se reservan 506 de estabilización y 91 de reposición para 2024.
Desde el Sindicato Independiente de Docentes (Sidi) se han opuesto tanto al número de plazas convocadas como al baremo, en el primer caso por hacerse en "un marco normativo que no beneficia lo suficiente la estabilidad laboral del colectivo docente interino" al no estar afectadas por la ley 20/2021.
En el caso del baremo entiende que "el peso de la experiencia se reduce notablemente, entre un 30 % y un 50 %, al quedar en un 40 % a todas luces insuficiente", a lo que Sidi suma su preferencia por los exámenes escritos en segundo lugar, no al principio.