MADRID (EP) . El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha asegurado que las comunidades autónomas financiarán los gastos extraordinarios -sanidad, educación y acogida de los menores no acompañados- derivados de la llegada de refugiados provenientes de Ucrania con fondos europeos.
En una entrevista en 'La Vanguardia' recogida por Europa Press este domingo, ha aplaudido que el Gobierno ha "estado en contacto con las comunidades desde el primer momento y la relación general con ellas ha sido impecable".
Ha cifrado en hasta 80.000 los refugiados ucranianos llegados a España aunque ha subrayado que "cuantificar esto es complicadísimo" puesto que muchos de ellos aún no han contactado con las autoridades.
Ha explicado que el 60% de los refugiados son adultos -el 75%, mujeres- y que más de la mitad de ellos tienen estudios superiores, algo que "puede cambiar ya que es posible que los primeros en salir hayan sido aquellos con más recursos".
Ha sostenido que España "ha ido un paso más allá" que la Unión Europea en la materia puesto que ha decidido acoger a quien llegue de Ucrania, sea cual sea su nacionalidad, en sus palabras.
El ministro ha pedido "tener empatía con Marruecos" y se ha planteado textualmente qué ocurriría en Canarias, o en Ceuta y Melilla, si Marruecos no tuviera la actitud y los recursos desplegados en la frontera.
Ha asegurado que el descenso de la llegada de migrantes a Canarias ejemplifica que "era cuestión de tiempo que se restablecieran plenamente las relaciones" y ha desvinculado las últimas llegadas a la valla de Melilla de la cuestión diplomática ya que, según él, este tipo de episodios ocurre de vez en cuando.
Escrivá ha sostenido que el Gobierno ha respondido con rapidez al alza de precios de la energía y ha aplaudido el acuerdo obtenido en el Consejo Europeo, que permite a España y Portugal adoptar medidas excepcionales para reducir los precios de la energía: "España ha logrado un gran éxito en el Consejo Europeo, hemos conseguido algo muy complicado".
En este sentido, ha descartado que haya riesgo de un colapso económico pero ha apostado por "aplicar políticas quirúrgicas dirigidas a los sectores que sufren" el impacto de la guerra y sus efectos en la energía.
Preguntado por una posible ralentización en la creación de empleo, ha convenido en que hay "síntomas de desaceleración en algunos sectores, pero aún es pronto", y ha subrayado que no es una tendencia generalizada.
Ha garantizado que las prestaciones de los pensionistas aumentarán "lo que suba la inflación" y ha explicado que los ingresos de la Seguridad Social son, según él, niveles nunca alcanzados.
En referencia al Ingreso Mínimo Vital (IMV), ha convenido en que "no lo está solicitando tanta gente" como esperaban y ha considerado la posibilidad de que los cálculos iniciales pudieran estar, en sus palabras, sesgados por la economía sumergida.
Ha asegurado que desde hace meses está abordando de una forma que ha calificado de muy constructiva con la consellera de Derechos Sociales, Violant Cervera, la creación de una ventanilla única donde solicitar el IMV y la renta de garantía de ciudadanía, y ha matizado que "no se trata exactamente de un traslado".