BARCELONA (EP). El preacuerdo de ERC y PSC para investir a Salvador Illa (PSC) presidente de la Generalitat prevé el traspaso de las primeras infraestructures de Rodalies a la Generalitat durante 2025, así como la constitución de la nueva operadora entre 2024 y 2025.
El documento consultado por Europa Press contempla la salida del régimen común y la gestión del 100% de los impuestos recaudados en Cataluña, así como un paquete de medidas sobre infraestructuras.
En Rodalies, prevén ejecutar este año los acuerdos suscritos el 9 de febrero entre Gobierno y Generalitat: concretamente transferir el déficit de explotación de Renfe de 2023; presentar un borrador de los estatutos de la nueva empresa operadora, y completar el estudio de las infraestructuras a transferir.
En este sentido, se cita el inicio del traspaso de la línea R1; impulsar conjuntamente entre Generalitat, Gobierno y Renfe un plan de choque de mejora de servicios; mantener el despliegue de la T-Mobilitat con vistas a implementar la integración tarifaria de toda Cataluña en 2025; continuar con las bonificaciones de la T-Jove, y mantener el compromiso de la gratuidad de la T-16 y su uso en toda Cataluña.
Los dos partidos acuerdan aprobar el 'Plan de choque para unas Rodalies dignas' con el fin de "dignificar el servicio actual".
Por otro lado, ambas formaciones prevén continuar la consolidación de L'Energètica, empresa pública de generación y suministro de energía renovable, para lograr la neutralidad climática de la Generalitat y su sector público en 2030.
Garantizan un modelo basado en implementar las energías renovables: "En consecuencia, el Govern de la Generalitat se opondrá a aquellos proyectos contrarios a este modelo en energético, como son los proyectos privados de las líneas eléctricas de evacuación de muy alta tensión (MAT) de la línea del Baix Cinca-Pierola-Rubí, la línea Valmuel-Begues y la línea Laluenga-Isona".
En materia hídrica y ante eventuales nuevos episodios de sequía, se comprometen a cumplir el calendario de inversiones relativas a "las nuevas infraestructuras de desalación previstas en la Tordera y el Foix", así como las estaciones de agua regenerada para llegar a 130 hm3/año, y garantizar una partida de 110 millones para la construcción de 24 plantas de agua regenerada.
También prevén dar continuidad al Pacte Nacional per la Indístria 2020-25 para lograr un peso industrial del 25% del PIB en 2030; un programa urgente de fomento de la vivienda con mantenimiento de los compromisos presupuestarios; la gratuidad de la educación de 0-3 años en el curso 2025-26, mantener el avance del calendario escolar y el impulso de una veintena de leyes durante la legislatura.
Asimismo, se mantendrá el impuesto de sucesiones y de patrimonio con los tipos actuales (sin implementar propuestas de deflactación del IRPF), y la rebaja del IRPF para rentas menores de 35.000 euros, tal como pactaron los dos partidos en el acuerdo de Presupuestos de 2024.
Sobre salud, se mantendrán y consolidarán las mejoras laborales (retributivas y organizativas) de los profesionales sanitarios hechas en 2023 y principios de 2024, y se garantiza el cumplimiento del calendario de inversiones previsto en el nuevo hospital Clínic, el nuevo Campus Salut de Girona y el nuevo hospital de Terres de l'Ebre (Tarragona), entre otras.
Los dos partidos se comprometen a dedicar un 2% del Presupuesto de la Generalitat a Cultura en 2025, como estaba previsto; mantener la Conselleria de Políticas de Igualdad y Feminismos, y mantener las convocatorias anuales del cuerpo de Mossos d'Esquadra, con un mínimo de 900 anuales, para llegar a 22.000 efectivos en 2030.
Por otro lado, el preacuerdo de investidura de ERC y PSC prevé "transformar" el Aeropuerto de Barcelona para que gane capacidad con nuevas conexiones intercontinentales de largo radio, para lo que se dará continuidad a la labor de la comisión técnica acordada entre Generalitat y Gobierno.
Así, ambas formaciones acuerdan que "el conjunto del sistema aeroportuario de Cataluña merece una modernización que fomente un mayor equilibrio territorial que corrija la excesiva especialización del aeropuerto de Barcelona-El prat en vuelos cortos punto a punto, en favor de una mayor conectividad de largo radio".
Por eso, acuerdan "dar continuidad a la labor de la comisión técnica acordada entre el Govern de la Generalitat y el Gobierno de España para definir el nuevo modelo de gestión catalán aeroportuario con el objetivo de transformar el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat para que gane capacidad con nuevas conexiones intercontinentales de largo radio".
Este nuevo impulso al Aeropuerto barcelonés "debe respetar la biodiversidad, la convivencia con vecinos y vecinas y las directivas ambientales europeas", así como velar por el consenso necesario territorial e institucional.
También prevén "determinar las características del futuro sistema aeroportuario catalán, que incorporará los roles que también deben tener los aeropuertos de Girona, Reus y Sabadell, y Lleida-Alguaire".
ERC y PSC se comprometen a promover las modificaciones legales necesarias para hacer efectiva la creación de un nuevo Consejo Rector Aeroportuario de Cataluña (CRAC), en sustitución del actual comité de coordinación aeroportuaria (CCA), para que la Generalitat "tenga un papel determinante en la definición, articulación y gestión del nuevo sistema aeroportuario".
Está prevista, asimismo, la creación de la Autoritat Aeropòrtuaria de Cataluña que "vehiculará los intereses de Cataluña en el nuevo modelo de gobernanza" y centralizará las competencias propias de la Generalitat relacionadas con esta actividad.