TRIBUNA LIBRE / OPINIÓN

Entre 'vices' anda el juego

5/07/2020 - 

¡Parece mentira el juego que da esta frase! Cuando le cambiamos los protagonistas principales…lo mismo vale para titular una película de 1983, “Entre pillos anda el juego”, protagonizada por Eddie Murphy y Jamie Lee Curtis, que para referirnos a los vicepresidentes del Gobierno “sanchista”, Carmen Calvo y Pablo Iglesias…En este caso concreto, no hace falta que cambiemos nada. Da igual que digamos “entre vices, que entre pillos anda el juego”, pues tanto monta, monta tanto. La palabra “pillo” es un adjetivo coloquial que lo utilizamos para nombrar al sujeto astuto o pícaro o a la sujeta astuta y pícara, que aprovecha su sagacidad para obtener algún beneficio en su favor o en la institución, partido o gobierno en el que milita y/o trabaja.

Hoy voy a hablar de dos “vice-pillos” (vicepresidentes pillos), expertos maestros en el arte de la demagogia y hábiles peritos en las técnicas populistas. Empezaré por la señora Calvo, como mandan los cánones de la buena educación y por aquello de…”las damas primero”.  La “sultana de Córdoba”, aprovechando la ley del silencio y del confinamiento –durante los 136 días de crisis, uno detrás de otro— se ha devanado los sesos en pensar qué podría hacer para seguir engañando y desviando a los españoles de los verdaderos problemas que les acucian en esta “nueva anormal normalidad”.

En vez de buscar soluciones a los ERTE impagados, a la destrucción de 85.873 empresas de hostelería, de comercio y de la construcción, a la pérdida de más de 792.000 empleos, a las colas interminables de españoles para recibir alimentos, al cierre de Nissan en Cataluña y Alcoa, a la situación crítica del sector turístico -que con 83,7 millones de turistas internacionales aporta más de un 15% al PIB y 2, 8 millones de empleos- y cuyas pérdidas ya se estiman en casi más de 10.000 millones de euros en el último mes…

Pues bien, como toda esta “morralla”, parece ser que ni les interesa, ni les preocupa, va la buena señora y airea a los cuatro vientos que su departamento viene trabajando -desde hace tiempo y mucho- en la “resignificación (¡menudo palabro se gastan estos del Gobierno!) del Valle de los Caídos” y en la creación de un “banco de ADN” de las victimas franquistas. Pero no solo eso, sino que además pretende elevar al Consejo de Ministros, de julio, un nuevo proyecto que modifique la actual “zapateril” Ley de Memoria Histórica por otra nueva, la Ley de la Memoria Democrática (¿?) que conlleva una partida económica especial  para instaurar un “plan de exhumación en todo el territorio español y sufragado con fondos públicos -¡ sí, sí,  con tus impuestos y los míos!- para  exhumar, a través de los ayuntamientos, a todas las victimas franquistas,( a las otras no, porque ni fueron víctimas, ni franquistas, ni  se cuentan para nada, ¿…? ) y devolverlas a sus familiares debidamente identificadas.

No contenta… quiere ilegalizar también la Fundación Francisco Franco y todas las fundaciones o asociaciones que, según ellos, “fomenten, promuevan o inciten pública, directa o indirectamente al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra las víctimas de la Guerra Civil Española y el franquismo, o que realicen apología del franquismo y del fascismo” (se supone que se refieren al fascismo de derechas, ¿no?). No sé para qué necesitan tantas leyes de Memoria…si viven colgados de la ignorancia histórica y desconocen el auténtico origen del “fascismo”. Actualmente está muy de moda llamar “facha” o “fascista” a todo aquello contrario a la izquierda, pero por extraño que parezca, el origen del fascismo no es la derecha, sino la extrema izquierda italiana de Benito Mussolini, miembro del Partido Socialista Italiano, y del filósofo neohegeliano Giovanni Gentile, que llegó a declarar que: “El fascismo es una forma de socialismo, de hecho, es su forma más viable”. ¡Señores del gobierno…ya va siendo hora de que aprenden historia política de una puñetera vez y dejen de confundir “el culo con las témporas”! ¡El “fascismo” no es la derecha, es la extrema izquierda, es el socialismo en su forma más viable!

Y siguiendo con las leyes…Si la primera fue recalificada por muchos como la Ley de la Venganza Histórica, la nueva debería ser de la Memoria Republicana… ¿o no? En esta ley se incluyen partidas presupuestarias especiales para fomentar e imponer en todos los colegios sus nuevos contenidos ideológicos y educativos (¿?), así como suprimir la titularidad del Pazo de Meirás a la familia Franco. Grave problema este, y que mientras no se confisque -al grito chavista de ¡Exprópiese… exprópiese!- con el contubernio de Iglesias y la anuencia de Sánchez, la mayoría de los españolitos de a pie no podrán/emos vivir felices y dormir tranquilos. ¡La verdad, es que razón no les falta, ya que esto, y solamente esto, es lo que le preocupa al 99,99% de los españoles! La crisis sanitaria, económica y socio laboral que está arruinando a España --por los cuatro puntos cardinales-- se las “trae al pairo”, por decirlo finamente y sin acritud.

Mientras todo esto ocurre en los feudos de la “Sultana de Córdoba”… el “Duque de Galapagar” ha estado tan sumamente ocupado y preocupado en que los sonidos de las cotidianas caceroladas --pese a los ímprobos esfuerzos de la Guardia Civil—no le alteraran su status de “happy family”, que no pudo visitar ninguna Residencia de Mayores--muy a su pesar-- durante el confinamiento, a pesar de depender su gestión orgánica, funcional y sanitaria directamente de su Ministerio de Derechos Sociales.

En el poco tiempo que le sobraba -después de sus múltiples y cotidianas visitas a las Residencias de Mayores- todavía ha tenido tiempo para convencer (verborrea no le falta) junto con su pareja Montero, la ministra de Igual-dá (que esté en ese, en otro o en el de más allá) a su compañero de escaño, Marlaska, (sin Grande, desde su gran mentira en sede parlamentaria y la consiguiente “purga” cargada de venganza) para que los agentes de la Guardia Civil -que protegen día y noche, por orden directa suya, su “casoplón” de Galapagar- denunciaran a dos peligrosísimas, terribles y desconocidas “terroristas” galapagareñas -Ascensión y Claudina- por negarse a identificarse en el perímetro de seguridad del “ídem”, mientras llevaban banderas de España, hacían sonar el himno nacional en su móvil y criticaban el excesivo dispositivo de la Guardia Civil que les impedían el paso y circular por una vía pública de un municipio de la España postconstitucional y democrática.

El implacable Marlaska, el otrora azote de los asesinos de ETA, el que fuera paradigma de justicia y honestidad, hoy imbuido del espíritu combativo y del ardor guerrero y urbanita de Iglesias and Montero, ha intentado recuperar su fama de “zorro justiciero” llevando a juicio a esas dos peligrosísimas y ya conocidas “terroristas. Ante tan peligrosa actuación y no menos importante resolución del caso, creo que deberíamos proponer a Marlaska (sin Grande) para la medalla al mérito civil o en su defecto al título, y ahora sí, de “Conde con Grandeza”, por haber conseguido llevarlas a juicio, sin ayuda de los antidisturbios, ni de la UCO, ni de los GEO, y sobre todo por el gran servicio prestado a España, preservando la integridad física y la vida de dos de sus más importantes e imprescindibles ministros que tanto bien están aportando a la unidad de España y a la vida de todos los españoles.

¡Y como pude prometer y prometí…y lo prometido es deuda…pues sí, esta semana sí que hemos hablado del Gobierno…porque “entre pillos o vices, vices o pillos, anda el juego”… y no precisamente al que a todos nos gustaría jugar… al democrático!

Pedro Manuel Hernández es Licenciado en Medicina y Cirugía, en Periodismo y ex Senador autonómico del PP por Murcia