El Tesoro Publico se rasca el bolsillo por su nueva deuda a medio y largo plazo

MADRID (EP). El Tesoro Público ha colocado este jueves 6.303,68 millones de euros en una nueva subasta de bonos, por encima del rango medio previsto, y ha elevado la rentabilidad en las tres referencias, ofreciendo un interés superior al 3,5% en los bonos a tres años, según datos del Banco de España. El aumento del interés ofrecido está aumentando el apetito inversor de los mercados, que en la subasta de este jueves ha demandado títulos por importe superior a los 11.600 millones de euros, casi el doble de lo finalmente adjudicado.

En concreto, en la subasta del bono a tres años las peticiones han ascendido a 4.277 millones de euros, por encima de los 2.587,65 millones adjudicados, y el interés marginal se ha colocado en el 3,533%, superior al 3,310% ofrecido en la subasta previa. En las obligaciones a 7 años (con vida residual de 4 años y cuatro meses), el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha colocado 1.983,46 millones de euros, por debajo de los 4.300 millones demandados, y la rentabilidad marginal se ha elevado hasta el 3,426%, muy por encima del 2,937% de la emisión anterior.

Por último, en las obligaciones del Estado a 10 años (con vida residual de 8 años y 1 mes), el importe adjudicado ha ascendido a 1.732,57 millones, frente a los casi 3.000 millones demandados, mientras que el interés marginal se ha elevado al 3,591%, también mucho más elevado que el 2,723% de la subasta previa.

La emisión de este jueves es la primera que se celebra después de que el pasado jueves el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidiera volver a elevar los tipos de interés en 25 puntos básicos, de forma que la tasa de referencia para sus operaciones de refinanciación se sitúa en el 4,50%, mientras que la tasa de depósito alcanza el 4% y la de la facilidad de préstamo el 4,75%. Con esta décima subida consecutiva del precio del dinero, que se ha situado en su nivel más alto en más de 20 años, el BCE ha seguido adelante con el endurecimiento de su política monetaria.

En línea con estas últimas subidas de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), el Tesoro ha ido mejorando los intereses ofrecidos, manteniendo el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles. Así, los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022, especialmente en el caso de las letras a más corto plazo.