análisis

El Dow Jones y los 40.000 puntos

28/05/2024 - 

El Dow Jones Industrial Average (DJIA), el segundo índice bursátil más antiguo del mundo. Creado en 1896 con un valor de 41, ha hecho historia al superar el nivel de los 40.000 puntos.

En julio de 1999, justo antes del tramo más exponencial de la burbuja tecnológica, David Elías escribió el libro 'Dow Jones 40.000, estrategias para aprovechar el mayor mercado alcista de la historia'. El Dow Jones había subido un 300% desde 2.500 a 10.000 en 8 años; y un 54% desde que, en diciembre de 1996, el por entonces presidente de la FED, Alan Greenspan, acuñara su frase mítica de la "exuberancia irracional". En ese contexto, el libro fue un best-seller. Se trataba de una oda a la inversión a largo plazo en renta variable, y preveía que el Dow Jones alcanzara el nivel de 40.000 en 2016, aunque también dibujaba escenarios incluso más alcistas. Todo ese optimismo se lo llevó por delante el pinchazo de la burbuja, pero al final se ha alcanzado ese nivel (aunque brevemente, por el momento). La rentabilidad anualizada del índice ha sido del 5%, frente a la del 9% que preveía Elías, pero cercana al 8% si tenemos en cuenta los dividendos; ¡que Elías prácticamente despreciaba en sus cálculos!

¿Realmente se equivocó Elías o simplemente se equivocó de índice?

El Dow Jones de Industriales se creó en 1896 para incluir a 12 empresas del sector industrial. Tan solo había otro índice bursátil, el Dow Jones de transportes, que se había creado en 1884 e incluía principalmente empresas de ferrocarriles. Los primeros índices utilizaban la ponderación de precios; es decir, las empresas cuya acción tiene un precio más elevado tienen un impacto mayor en el resultado del índice, independientemente de su número de acciones. Así están construidos los índices Dow Jones de industriales y de transportes y el Nikkei-225 japonés. En estos índices, si una empresa hace una partición de sus acciones (un Split), pierde importancia en el índice, a pesar de que su tamaño no ha cambiado; y si lleva a cabo una fusión con acciones, tampoco gana peso, a pesar de pasar a ser una empresa más grande. Por este motivo, en la actualidad han ganado en relevancia los índices con ponderación por capitalización bursátil, que tienen en cuenta el tamaño total de la empresa. En EEUU, los dos más seguidos son el S&P-500 y el Nasdaq Composite. Por tanto, probablemente ahora Elías hubiese titulado su libro "S&P-500 5000" o "Nasdaq 10.000". El primero alcanzó ese nivel en febrero de este año, pero el segundo lo hizo ya en junio de 2020. En resumen, el S&P-500 ha tenido un comportamiento en el largo plazo similar al del Dow Jones de industriales (incluso algo inferior si tenemos en cuenta los dividendos), pero el Nasdaq Composite sí que ha estado cerca del 9% anual que preveía Elías, si le incluimos los dividendos.

En el fondo tenía razón

Elías erró en la fecha, pero no en la bondad de la inversión en renta variable a largo plazo y en el efecto multiplicador de la acumulación. Eso sí hay que hacerlo con cautela, no todo vale; y como decía Howard Mark, copresidente de Oaktree Capital Management, la mayor gestora de activos distress del mundo, es su última carta a los clientes: "No esperes hacer dinero sin asumir riesgo, pero tampoco esperes hacerlo simplemente por tomarlo. Tienes que sacrificar certeza, pero tienes que hacerlo con las habilidades adecuadas con inteligencia, y con la emoción bajo control." ¡Valor y suerte en sus inversiones!

Óscar del Diego Ereza es director técnico y de análisis de Ibercaja Gestión