CARTAGENA. La eliminación del Odilo FC Cartagena Club Baloncesto en la fase de ascenso a la Liga LEB Oro, producida con una muy polémica derrota por 76-73 en la pista del Teknei Bizkaia Zornotza, sigue coleando en la ciudad portuaria y, tras las duras declaraciones de su entrenador, Gustavo Aranzana, quien habló abiertamente de "auténtica vergüenza" y "atraco", la entidad se refirió a un fin de temporada "con sabor agridulce" tras "haberlo dado todo por devolver la ilusión del baloncesto a Cartagena".
El arbitraje del madrileño Israel Chacón Blázquez y el tinerfeño Mikel Wiot Espinosa en el polideportivo Larrea de la localidad vizcaína de Amorebieta desesperó a los blanquinegros, que se quejaron amargamente sobre todo por la señalización de una falta personal sobre el triplista cuando quedaban tres décimas de segundo para que acabara el choque y que permitió al Zornotza voltear la eliminatoria ya que en ese momento el resultado era de empate a 73 y el Odilo había ganado en el partido de ida en Cartagena por 65-63 y tenía, por lo tanto, dos puntos de ventaja para acceder a la siguiente ronda en su pelea por llegar a la LEB Oro desde la LEB Plata, en la que continuará la próxima temporada.
Alberto Cabrera anotó los tres tiros libres para certificar el pase de los vascos y eso hizo estallar a un técnico tan veterano Gustavo Aranzana, de 65 años y con una dilatada experiencia de 47 en los banquillos, incluyendo un buen número de temporadas en la élite.
"Fuimos todo el rato por delante en la eliminatoria tanto en Cartagena como en Amorebieta y nos quitaron la ilusión a un club joven y a una ciudad. Es una auténtica vergüenza y nos estamos cargando esto. Estoy orgulloso del equipo porque no se puede jugar mejor y es injusto lo hecho por los árbitros", dijo el vallisoletano.
"Fue un atraco y lo más duro es que nos quitaron la ilusión, pero no pasará nada como siempre y a tragar. Llevo toda la vida en esto y pensaba que esto se había terminado, pero no pasa nada y seguiremos. Fuimos superiores y jugamos fenomenalmente bien y sólo el arbitraje le regaló la victoria al rival", añadió.
Ya más en frío desde el club, a través de sus cuentas en las redes sociales, también lamentaron haber concluido el curso de este modo.
"Llegamos al final de temporada con un sabor agridulce, pero con la sensación de haberlo dado todo para devolver la ilusión del baloncesto a Cartagena. Gracias a jugadores, staff, Odilo, FC Cartagena, patrocinadores… Gracias afición. ¡Cebé!", señaló la entidad en Twitter y en Facebook.