MURCIA. El nuevo Laboratorio Regional de Salud Pública permitirá la implantación de nuevas líneas de trabajo para la investigación de bacterias y virus en alimentos y en aguas residuales mediante PCR, comprendido el rastreo de virus como el Covid-19, contaminantes y residuos, incluidos medicamentos.
Este nuevo espacio, que se encuentra ya en la recta final de las obras, estará integrado en las mejoras para la ampliación y reforma del edificio de mantenimiento del hospital general universitario Reina Sofía y dispondrá de unas instalaciones adecuadas a su funcionalidad y nuevas necesidades.
En concreto, las obras permitirán duplicar la superficie del nuevo laboratorio, que será de 950 metros cuadrados, lo que conllevará una distribución de los espacios acorde a las necesidades actuales, además de reducir los riesgos de exposición frente a agentes biológicos y químicos en cuanto a espacios de trabajo, almacenamientos, vestuario e higiene de los trabajadores.
El consejero de Salud, Juan José Pedreño, ha visitado este espacio y ha destacado que "en estas nuevas instalaciones y los medios con los que contará posibilitarán la respuesta a situaciones de especial riesgo o alarma para la salud pública", según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.
Ha añadido que, de este modo, "se podrán investigar virus en alimentos, muestras ambientales y muestras clínicas, bacterias en alimentos, muestras ambientales y muestras clínicas, alérgenos y organismos modificados genéticamente en alimentos, además de una línea de análisis de aguas residuales, incluyendo el rastreo de virus como el Covid-19".
El edificio cuenta en planta baja con despachos y talleres. En planta primera se ubican los vestuarios, así como el área de microbiología con dos laboratorios e instalaciones auxiliares como cámaras de conservación, sala de estufas y despachos. En la planta segunda se desarrollan actividades de laboratorio químico sobre muestras de aguas, alimentos y otras.
La obra tiene un importe de adjudicación de 1.163.453 euros. Este proyecto está financiado al 80 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Feder de la Región de Murcia 2014-2020.
El actual laboratorio, ubicado en las dependencias de la Consejería de Salud, presenta algunas carencias funcionales y de espacio físico que condicionan la ampliación de nuevas líneas de investigación, así como la incorporación de nuevos equipos analíticos necesarios como PCR y nuevos equipos de cromatografía.
Durante el último año se han analizado en el actual laboratorio unas 7.500 muestras con más de 30.000 determinaciones. Entre sus principales líneas de trabajo destaca el análisis químico y microbiológico, según reglamentación oficial de aguas, alimentos y bebidas, residuos de medicamentos y productos zoosanitarios en alimentos, investigación de contaminantes en aguas y alimentos y bacterias patógenas, así como los agentes causantes de toxiinfecciones alimentarias.
Asimismo, dispone de modernos equipos para analíticas, entre los que destacan cromatógrafos de gases y líquidos, equipos de espectroscopía atómica ICP-masas, analizadores de inmunofluorescencia para detección de microorganismos y sistemas autómatas de procesamiento de muestras.
Entre sus principales funciones está la prevención y control en materia de salud pública sobre las muestras que le sean remitidas por las correspondientes unidades o a petición de parte y que requieran un análisis sanitario, empleando las técnicas microbiológicas, bromatológicas, fisicoquímicas y de aseguramiento de la calidad analítica que sean precisas.
La mayor parte de los análisis se realizan de forma programada en colaboración con otros servicios y sirven para la prevención de enfermedades y realizar análisis en casos de denuncias y en casos de alertas sanitarias. Actualmente, su plantilla está compuesta por 23 funcionarios distribuidos en las áreas de físico-química, microbiología y calidad.