VIDEOCONFERENCIA DESDE PARÍS

El embajador en la OCDE: “El Gobierno español debe entusiasmarse con el sector agroalimentario murciano”

18/06/2020 - 

MURCIA. Manuel Escudero, embajador de España ante la OCDE, valora que solo la deuda “bien invertida” permitirá a la economía iniciar un periodo de recuperación tras la crisis provocada la pandemia de coronavirus. En una videoconferencia ofrecida desde París a los miembros del Círculo de Economía, el también secretario de Política Económica y Empleo del PSOE, destaca la importancia que han tenido los ERTE para evitar una mayor pérdida de empleo y el ingreso mínimo vital para mantener cierta protección a los colectivos más vulnerables.

Insiste en que la protección de los trabajadores ha sido posible por la rapidez con la que habría actuado el Gobierno de España facilitando un modelo que permite mantener el puesto de trabajo mientras el Estado asume el 70% de los salarios. Al tiempo, sostiene en que los avales de 100.000 millones de euros que el Gobierno ha prometido para las empresas españolas supondrán una inyección imprescindible para la empresa española.

Desde París, al frente de la representación española en la OCDE, Manuel Escudero sostiene en que “España debe entusiasmarse con Murcia y sector agroalimentario hasta convertirlo en puntero y líder mundial”, una frase que despertó el reconocimiento de un auditorio virtual formado por empresarios y directivos de empresas líderes en la Región. En este sentido, recordó que Europa debe jugar “y está jugando” un papel determinante en una crisis “simétrica” que está afectando a todo el mundo.

Expresó su deseo en que el próximo viernes la Unión apruebe un suficiente paquete de fondos para la recuperación: “Europa está herida y no se trata solo de solidaridad, si no de mercado integrado”. Es el mercado, precisamente, el que en su opinión debe contribuir en esta operación en la que la pandemia ha afectado, “a unos más que otros, pero el que menos ha perdido un 6% de su producto interior bruto”.

Valora que España lo está haciendo “sanitaria” bien con la aplicación del sistema de “trazar, testear y rastrear”, pero insiste en que una vez que se supere la crisis sanitaria va a convertirse en una crisis económica que puede deparar en una crisis social.

El mundo está perdiendo desde un 6 a un 15% su PIB. En unos países más que otros, por lo que la solidaridad internacional es fundamental.

Defiende, en este sentido, en que la salida que está aplicando España con una hoja de ruta o trazado es importante. Marcando objetivo que contribuyan a reajustar tanto el sistema productivo como la fórmula social en la que nadie se quede atrás. Para ello, valora el ingreso mínimo vital, que no cree que pueda ser argumento para mantener un alto índice de economía sumergida; sino como el apoyo determinante para buscar una igualdad social, “y ni siquiera desincentivar la búsqueda de empleo”.

La preocupación del embajador Escudero Zamora es que la deuda que deben asumir los estados para la recuperación pueda devenir en una deuda corporativa. Es decir, de las empresas; y por tanto en una deuda financiera como la vivida en 2018. Aún así, confía en la resiliencia de sectores como el agroalimentario murciano para ser el motor definitivo que contribuya a la recuperación.