MURCIA. El alcalde de Murcia, José Ballesta, ha informado de que los Servicios Sociales del municipio han tramitado más de 1.150 ayudas de emergencia por el COVID-19 por un importe de 900.000 euros, informaron fuentes del Ayuntamiento en un comunicado.
Ballesta ha explicado que desde que el pasado el 27 de abril, que se puso en marcha el nuevo sistema de tramitación que posibilita "agilizar y acortar los tiempos de espera al mínimo", se tramita una media de 110 ayudas diarias. Esto supone un incremento del 300% con respecto a la tramitación habitual.
Las ayudas oscilan entre los 430 euros para familias monoparentales y los 1.071 para núcleos familiares de varios miembros. Estas subvenciones directas se complementan con la red asistencial de ayudas y prestaciones municipales destinadas a los colectivos vulnerables, entre los que se encuentran el servicio de comidas a domicilio, la teleasistencia y la ayuda a domicilio.
"Nuestro objetivo prioritario es garantizar la cobertura de las necesidades sociales básicas a toda la población del municipio, con especial atención a los sectores y grupos más vulnerables, durante la persistencia de la crisis social derivada de la pandemia, potenciando la coordinación con otras administraciones y el tercer sector", ha indicado el alcalde.
Desde la declaración del estado de Alarma, el Ayuntamiento ha reforzado la plantilla de los centros municipales de Servicios Sociales e intensificado la atención social un 48%, duplicando el número de personas atendidas con respecto al mismo periodo del año pasado.
El Área de Servicios Sociales del ayuntamiento de Murcia estima que se beneficien unas 6.000 familias murcianas, lo que supondrá un importe estimado de 3 millones de euros en ayudas directas.
Serán destinatarios de estas ayudas las personas o familias que se encuentran en una grave situación de vulnerabilidad social y no dispongan de ningún tipo de ingresos para la cobertura de las necesidades básicas.
Además, desde la Concejalía de Derechos Sociales y Familia se realiza el seguimiento telefónico continuado de los casos de desprotección infantil, personas dependientes, familias en situación de riesgo, acompañamiento para la inclusión, juntas directivas de los centros sociales de mayores y centros de la mujer y asociaciones de personas con discapacidad, para la detección y apoyo de cualquier situación de vulnerabilidad que pueda detectarse.
Asimismo, se realiza un seguimiento telefónico continuado, tras el cierre al decretarse el estado de alarma, de los usuarios de los Centros de Estancias Diurnas y de los menores derivados por los Servicios sociales a los Centros de Conciliación.
El promedio semanal de llamadas atendidas por los empleados de Servicios Sociales -que trabajan en su mayoría desde casa- oscila entre las 3.000 y 3.500. Se han registrado picos diarios de hasta 622 llamadas diarias.
El Consistorio ha establecido un compromiso de atención, dando respuesta a las consultas al día siguiente o en un plazo máximo de tres días.
El dispositivo de los centros municipales de Servicios Sociales Ciudad de Murcia, Murcia Norte y Murcia Sur se completa con el trabajo asistencial que desarrollan las 40 unidades de trabajo social, repartidas por todo el municipio.
Por su parte, la plantilla de los Centros Municipales se ha reforzado con profesionales de otros departamentos del Área de Servicios Sociales, para atender la demanda y colaborar en la gestión y tramitación de las diferentes prestaciones sociales derivadas de la misma (ayudas económicas, Renta básica, etc.)
Se mantiene la atención de emergencias sociales derivadas por el 112, 092 y 061 o de los diferentes establecimientos sanitarios a través del SEMAS, que tras la valoración de la situación y la respuesta inmediata, informa al Centro de Servicios Sociales de referencia para que dé continuidad a la intervención.
En coordinación con el IMAS se han adoptado las medidas necesarias para garantizar la prestación de los servicios de ayuda a domicilio y teleasistencia domiciliaria del Sistema de Atención a la Dependencia, haciéndolas extensivas a la prestación municipal de dichos servicios, incrementando la intensidad del seguimiento, así como a los servicios propios de respiro familiar (suspendido temporalmente salvo en casos excepcionales y con seguimiento telefónico) y comidas a domicilio que se mantiene funcionando en su totalidad.