Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Santa María del Rosell de Cartagena. Fotos: LA ROCALa mayor parte de las víctimas mortales eran personas mayores con patologías previas
MURCIA. Aunque con menor incidencia que en otros puntos de la pandemia, la quinta ola ha causado grandes estragos en la Región. Desde que comenzaran a repuntar los contagios a comienzo de julio, la Comunidad ha sufrido varios reveses en forma de restricciones y nuevos fallecimientos hasta que las vacunas y la evolución natural de las infecciones redujeron la amenaza. Por tanto, es el momento de observar con retrospectiva cómo ha transcurrido la quinta ola por la pandemia y analizar el papel que han jugado la inmunización, pues el 40% de los fallecidos en este periodo no había completado su pauta.
En concreto, de las 109 personas que perdieron la vida a causa del coronavirus entre el 10 de junio y el 12 de septiembre el 40% no estaban vacunadas o no habían recibido ambas dosis, de acuerdo con los últimos datos facilitados por la Consejería de Salud a Murcia Plaza. Asimismo, indica que el 86% de los casos detectados en este periodo corresponden a personas sin vacunar.
De esta forma, encontramos que el 60% de los fallecidos sí había sido inmunizado por completo, lo que encuentra su explicación en el hecho de que la mayoría de las víctimas del virus son personas mayores con patologías previas.
Al fin y al cabo, este grupo de población ya había sido vacunado antes de que comenzara esta oleada de contagios, por lo que al representar mayoritariamente las muertes provocadas por la covid encontramos un alto porcentaje de personas inmunizadas que han perdido la vida. Esto se debe a que, incluso con la ayuda de las dosis, se trata de una población con un alto riesgo.
Así pues, desde Salud recuerdan que la efectividad de la vacuna ha sido del 80%, es decir, ha evitado el 80% de infecciones, casos graves y de defunciones, por lo que de no haber existido esta ayuda contra el virus el número de fallecidos habría sido mayor. De hecho, esta ola representa el 6,34% de las personas que han perdido la vida en la Región desde que comenzara la pandemia.
La efectividad de las vacunas resulta aún más patente si comparamos los resultados de los últimos meses con la primera ola. Mientras que el número de fallecidos entonces fue de 150 con 3.300 contagios, los decesos en esta quinta ola ascienden hasta la fecha a 117 con más de 26.000 positivos.
Aunque entre los más jóvenes la infección no debería causar grandes estragos, lo cierto es que la presencia de patologías previas puede agravar las consecuencias del contagio, así como dejar secuelas a largo plazo.
Por tanto, no solo las personas de más de 70 años se encuentran en riesgo por el coronavirus, sino que todos los grupos de población mayores de 12 años deben protegerse para evitar el peligro. En ese sentido, merece la pena recordar los últimos casos dos casos que ha sufrido la Región de personas de menos de 50 años sin vacunar.
