MURCIA (EP). El 11,6% de los ocupados de la Región de Murcia no cubre la jornada laboral completa y, aunque quiere y está disponible para trabajar más horas, no encuentra dónde hacerlo, según el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo publicado este jueves, que también indica que este porcentaje ha crecido en cinco décimas en el último año.
Por otro lado, Murcia es la segunda región con la mayor proporción de ocupados en situación de subocupación horaria, esto es, la población económicamente activa que no integra el colectivo de los desocupados pues tiene trabajo, pero de menos horas de las que se consideran necesarias para una jornada laboral completa.
El mismo informe señala que la Región de Murcia, con un 28,8%, es la quinta comunidad con mayor porcentaje de parados de larga duración, es decir, aquellos que llevan más dos años sin trabajar, y que es la tercera autonomía en la que los empleos de alta cualificación son menos.
Los empleos de alta cualificación han crecido más deprisa que los de media y baja formación. Así, de los 840.600 puestos de trabajo que se crearon en 2021, unos 465.900 --el 7%-- eran de alta cualificación, frente a los 374.700 restantes, que exigían una formación media o baja.
Javier Blasco, director del Adecco Group Institute, ha sostenido que este cambio en el perfil demandado "es una buena noticia", que confirma "una apuesta decidida por la formación continua y la recualificación de personas, tanto desempleadas como aquellas que trabajan en sectores con bajas retribuciones".
"La nueva configuración legal, más rígida, de los contratos formativos, las incertidumbres sobre la entrada en vigor del nuevo modelo de formación profesional dual y la nueva Ley de Universidades, y el retraso de nuestro país en las inversiones en formación para el empleo, arrojan muchas sombras sobre esta necesidad esencial de nuestro mercado de trabajo", ha agregado.
La proporción de empleos de alta cualificación en el total de la ocupación ha aumentado en 13 comunidades autónomas, con La Rioja, País Vasco y Andalucía a la cabeza. No obstante, es Madrid la autonomía con mayor proporción de empleos de alta cualificación, con un 45,3%, pese a su reducción interanual de cuadro décimas. Por el contrario, Extremadura, Castilla-La Mancha y la Región de Murcia registran una proporción inferior al 30% en este tipo de perfiles.
Los empleos cualificados más repetidos son los de directores y gerentes, las ocupaciones técnicas y profesionales, científicas e intelectuales así como las ocupaciones técnicas y profesionales de apoyo.
El Monitor de Adecco también confirma un aumento de la subocupación horaria. La proporción de personas en situación de subocupación horaria en el total de ocupados de España es de un 9,3%, 0,5 puntos porcentuales por encima que en el cuarto trimestre de 2020.
Esta situación se ha repetido en todas las comunidades autónomas. Extremadura ocupa el primer lugar, con un 12% de los trabajadores ocupados en situación de subocupación horaria, seguida de Murcia y Baleares, ambas con un 11,6%. En el extremo contrario, destacan cuatro autonomías con menos de un 9% de sus ocupados en situación de subocupación horaria: Cataluña, País Vasco, Aragón y Galicia.
En este sentido, España concentra el 30% de los parados de larga duración en la Unión Europea, con 912.000 personas.
La cifra de parados de larga duración en España, con 26.600 más al cierre de 2021, acumuló entre octubre y diciembre su tercer trimestre consecutivo al alza, una situación que no ocurría desde 2014. No obstante, al mismo tiempo se logró reducir la cifra de desocupados de corta duración en la segunda mitad del año pasado.
El número de parados de larga duración representa en España un 27% del total de desempleados, tres puntos porcentuales más que en 2020. Ese porcentaje es uno de los más altos de la UE, solo por detrás de Grecia (40,6%), Italia (34,5%) y Bulgaria (28,4%), como muestra el informe de Adecco.
La proporción de parados de larga duración en España se sitúa siete puntos porcentuales por encima de la media de la UE, fijada en 20,2%, y se aleja en unos 20 puntos de tasas como las de Suecia (6,7%) y Dinamarca (7,6%).
Los 912.000 parados de larga duración de España equivalen a la suma de este colectivo en Suecia, Dinamarca, Finlandia, Polonia, República Checa, Hungría, Holanda, Austria, Rumanía, Portugal, Bélgica, Bulgaria, Grecia, Croacia, Chipre, Letonia y Lituania juntos, como apuntan desde Adecco.
El director del Adecco Group Institute, Javier Blasco, califica el dato de "dramático" y recomienda "superar los esquemas tradicionales de abordaje de las políticas activas de empleo, infructuosas en sus últimas manifestaciones".
Por autonomías, Andalucía cuenta con la proporción más alta de parados de larga duración, un 31,1%, seguida de Asturias, un 30,5%. La comunidad con menos paro de larga duración es Baleares, con un 18%.
Con ese aumento del número de parados de larga duración, también se redujo la cantidad de beneficiarios del seguro de desempleo, algo que no ocurría desde marzo de 2019. El 67,1% de los parados está cobrando una prestación por desempleo, 2,9 puntos menos que hace un año. La proporción de parados que cobran la prestación por desempleo se ha reducido en once autonomías.
Tras la recuperación de la presencialidad en las oficinas, la siniestralidad laboral registró un incremento interanual de un 14,6%, con 63,7 accidentes que causaron baja cada 10.000 ocupados, el dato más alto desde el inicio de la pandemia.
La siniestralidad laboral lleva dos trimestres consecutivos en aumento en todas las comunidades autónomas, algo que no ocurría en los 20 años anteriores. De hecho, en Baleares, La Rioja, Galicia y la Comunidad de Madrid tuvieron incrementos por encima del 20% en el cuarto trimestre. Los incrementos más moderados han correspondido a Aragón (+4,4% interanual), Andalucía (+7,3%) y Cantabria (+7,8%).
Navarra permanece como la región con mayor número de siniestros, con 89,7 cada 10.000 ocupados, en tanto que Canarias cuenta con las cifras más bajas, 53,1 siniestros por cada 10.000 ocupados.
En la situación opuesta, las tres regiones con menor siniestralidad, que también son las únicas con menos de 60 accidentes cada 10.000 ocupados, son Canarias (53,1 siniestros; +18,4% interanual), la Comunidad de Madrid (54,8; +20,1%); y Cantabria (59 accidentes; +7,8%).