MURCIA. De los 200 invitados a una boda que tuvo lugar el pasado sábado, 15 de agosto, 170 se encuentran en seguimiento tras dar resultado positivo el novio en una prueba PCR, según ha informado la Consejería de Salud.
En consecuencia, este departamento regional ha señalado que se harán todas las pruebas que el Servicio de Epidemiología considere necesarias para estudiar si hay más contagiados en la celebración que tuvo lugar en el salón Magna Garden, situado en la pedanía murciana de Zarandona.
De momento, el novio es el único que ha registrado una PCR positiva, aunque los 170 invitados que se encuentran en cuarentena continúan recibiendo pruebas ya que el virus puede ocultarse en los primeros cuatro o cinco días desde el contagio, según informa el consejero de Salud, Manuel Villegas.
En concreto, el novio dio positivo en la prueba PCR que se le ha practicado a los trabajadores y usuarios del centro de menores de Alguazas, donde hay, hasta el momento, 24 afectados (17 menores y 7 empleados), siendo el contrayente uno de los integrantes de la plantilla de esta instalación.
A raíz de este brote de 24 contagiados, que obligará a nuevas cuarentenas de sus contactos estrechos, el Gobierno autonómico ha decidido aplicar a las de menores los mismos nuevos controles que habrán de hacerse en las residencias de ancianos y los que ya se aplicaban por normativa autonómica.
Por su parte, Salud ha recordado que las bodas son actos de "elevado riesgo", por lo que ha vuelto a hacer una llamada a la prudencia y a extremar las precauciones.
El decreto aprobado en junio por la comunidad para regular las actividades durante la "nueva normalidad" señala que la ocupación máxima permitida será del 75% del aforo del local en el que tengan lugar, tanto si se trata de un local cerrado como si se trata de espacios al aire libre.
En todo caso, el número máximo de personas asistentes a la celebración será de 200 en el caso de locales cerrados y de 500 en el caso de espacios al aire libre, que deberán permanecer sentadas. En consecuencia, no podrá utilizarse la pista de baile para su uso habitual.
No obstante, cuando se trate de espacios al aire libre, la cifra de asistentes se podrá ampliar hasta 800 personas en aquellos casos en que los responsables elaboren un plan de actuación específico.
Además, el Gobierno regional no descarta limitar las bodas y los eventos sociales en aquellos municipios con mayor incidencia del coronavirus. Preguntado por la cuestión, López Miras, presidente de la Región, ha declarado que se trata de un asunto que "está encima de la mesa".