MADRID (EP). La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha asegurado este miércoles, durante la sesión de control al Gobierno, que habrá diálogo con los partidos políticos sobre la reforma laboral, que se encuentra en negociaciones con los sindicatos y la patronal y que debe estar aprobada antes de fin de año para conseguir la recepción de los fondos europeos.
"Voy a cumplir mi palabra. Necesito discreción en la gestión actual, pero por supuesto el diálogo también será político", ha respondido Díaz al diputado de ERC, Lluís Salvadó.
El parlamentario catalán ha reconocido la "buena gestión" del Ministerio de Trabajo durante la pandemia, pero le ha recordado a Díaz que con la reforma laboral "es la hora de la verdad". Salvadó ha valorado el diálogo social sobre el que se está construyendo la futura normativa, aunque ha insistido en que también es legítimo "el modelo de relaciones laborales que puede establecer el Legislativo".
Por este motivo, el diputado de ERC ha recalcado que "no se puede repetir lo que ha pasado con la Ley de Pensiones" y ha pedido a Díaz que haya debate sobre la reforma laboral en el Congreso.
La reforma laboral debe estar publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), antes del 31 de diciembre, como parte del compromiso del Gobierno con Bruselas para la recepción de los fondos europeos. Ante la proximidad de la fecha, la mesa de diálogo social, integrada por el Gobierno, los sindicatos y la patronal, ha pasado a mantener reuniones diarias para tratar de alcanzar un acuerdo tripartito.
Díaz ha repetido en varias ocasiones, incluida la sesión de este miércoles, que el Gobierno de España va a "cumplir su palabra", así como su acuerdo de Gobierno y el componente 23 enviado a Bruselas, y la reforma estará aprobada antes de que termine el año. El último Consejo de Ministros de este 2021 está previsto para el 28 de diciembre, y no se descarta que la mesa de diálogo social apure los plazos.
Salvadó ha reprochado a la ministra que no están escuchando "ninguna propuesta" sobre los despidos y ha manifestado también la preocupación de su grupo al respecto. También le ha avisado de que no contarán con su "aplauso" si la futura legislación no recoge "cuestiones básicas y fundamentales".
Díaz ha tranquilizado al diputado de ERC y ha asegurado ante el pleno que la intención de esta reforma laboral es revertir las normas "que han causado un auténtico destrozo del mercado de trabajo español".
Aunque la negociación es "discreta", Díaz ha expuesto algunas de las posiciones de su cartera como intentar reequilibrar la negociación colectiva, recuperar la ultraactividad de los convenios, mejorar la subcontratación y acabar con la precariedad y la temporalidad, "el problema más grande que tiene España".
"Si tenemos vidas precarias, si tenemos trabajos precarios, tenemos un país precario. En definitiva, con el apoyo de ustedes vamos a ser capaces de cambiar nuestro país", ha contestado Díaz a Salvadó. La ministra también ha agradecido a ERC su "madurez y sensatez" en su apoyo al Gobierno.
Díaz también ha respondido en esta sesión de control a la diputada de Vox, Macarena Olona, que le ha interpelado por el derecho a la protesta. Díaz le ha citado el artículo 7 de la Constitución, que reconoce la defensa de los intereses económicos y sociales de los sindicatos y asociaciones empresariales, y ha recalcado el cumplimiento de la Constitución por parte del Gobierno.
Olona ha acusado a Díaz de que con ella "los trabajadores han perdido su derecho a huelga" y ha cargado también contra los sindicatos, que "protegen" a la ministra en lugar de a los trabajadores, según la parlamentaria.
"Donde hay papeles, las barbas se callan", le ha respondido Díaz, y ha leído algunos puntos del programa de Vox que aluden a cuestiones laborales. "Jamás van a gobernar, pero si llegaran a gobernar, tendrían huelgas y movilizaciones masivas", le ha advertido.
La ministra ha citado la limitación de los piquetes a los centros de trabajo, el fin de la ultraactivdad, la reducción de la indemnización por despido, los contratos basura, el recorte de las pensiones públicas o el retraso en la edad de jubilación, todas incluidas en el programa de Vox.
"De llevarse adelante su programa (...), ustedes sí iban a ser víctimas de movilizaciones masivas", ha zanjado la ministra.