Dos vecinos de Murcia, en su casa, confinados. Foto: MARCIAL GUILLÉN (EFE)MURCIA. Los médicos de la Región de Murcia hacen seguimiento a cerca de 30.000 personas sospechosas de padecer el coronavirus o que han mantenido encuentros con infectados. 15.834 de ellos son los denominados 'contactos estrechos', esto es, ciudadanos obligados a quedarse en cuarentena tras mantener algún tipo de contacto con un infectado. El resto, 13.854, son 'casos posibles', es decir, personas con síntomas del Covid-19, pero que no han podido realizar la prueba diagnóstica.
Todos ellos reciben atención de los médicos de cabecera, que desarrollan un seguimiento individualizado por teléfono. La atención primaria se ha volcado en la lucha contra la pandemia. Los propios facultativos determinan si los enfermos deben ser trasladados a los centros sanitarios en caso de que se agraven sus síntomas o si por el contrario pueden permanecer en casa, eso sí, en estricto aislamiento con el resto de inquilinos del hogar.
De hecho, en caso de incumplimiento de la cuarentena, los sanitarios están obligados a avisar a la Policía. Hasta la fecha, hay 17 pacientes identificados por poner en riesgo a la población por no respetar el aislamiento.
Son además los doctores quienes decretan el alta de sus pacientes, cuya decisión clínica toman en función de los síntomas pues la Región aún no hace los test para los 'posibles casos' ni los 'contactos estrechos'. El alta se suele dar a partir de los 14 días desde que comienza la vigilancia médica, aunque se puede demorar hasta los 21 días.
Desde que comenzó la pandemia se han notificado ya 1.536 altas, según detalló este miércoles el consejero de Salud, Manuel Villegas, en su comparecencia habitual. No obstante, el SMS registró este martes 584 nuevos 'posibles casos'.
"La evolución no es mala", indicó Villegas. "Todavía no hemos llegado a la fase descendente [el periodo posterior al pico de la curva de contagios], pero es verdad que hay menos ingresos por casos posibles", comentaba el consejero. Con todo, la cifra total volverá a aumentar cuando lleguen los llamados test rápidos. Este previbisible incremento no preocupa al titular de Salud: "Aunque suba el número, tenemos controlados los casos posibles, por eso llamo a la tranquilidad", aclaraba Villegas.
