¿Cuándo se recomienda la artroscopia de rodilla?

6/07/2021 - 

MURCIA. Esguinces, distensiones o roturas de menisco y ligamentos son algunas de las lesiones más habituales en la rodilla.

Se trata de problemas que pueden afectar mucho a nuestra calidad de vida, pues causan dolor, hinchazón e inestabilidad en la articulación, por lo que la rodilla puede ceder o quedar bloqueada.

Ante este tipo de lesiones, se aplican diferentes tipos de tratamientos que incluyen reposo, protección de la articulación, compresión y elevación de la rodilla, aplicación de hielo o medicación con analgésicos y antiinflamatorios.

En los casos más graves o crónicos, los traumatólogos pueden recomendar fisioterapia o cirugía para que la articulación pueda recuperarse completamente.

Una de las técnicas quirúrgicas más utilizadas en estos casos es la artroscopia de rodilla, un tipo de intervención rápida y poco invasiva, con muchos beneficios para los pacientes frente a otras cirugías.

¿Cómo se realiza operación de rodilla por artroscopia?

Cualquier técnica artroscópica consiste en introducir el material dentro una articulación a través de unas pequeñas incisiones.

"El traumatólogo realiza unas pequeñas incisiones en la piel que comunican con la articulación a tratar, en este caso, con la rodilla. Estas incisiones se llaman portales y suelen medir menos de 10 mm", explica el Dr. Diego Giménez Belmonte, jefe de traumatología del Hospital Quirónsalud Murcia.

A través del primero de estos portales,"el cirujano introduce un sistema de visión, dotado de luz, para detectar cualquier patología o lesión que pudiera haber. Esta primera fase de la artroscopia es únicamente diagnóstica. Después, si es necesario, podemos hacer otras pequeñas incisiones para introducir una gran variedad de instrumentos e implantes con el fin de reparar las lesiones que hayamos encontrado", añade.

Según el Dr. Giménez, esta técnica permite un abordaje menos agresivo y mucho más funcional, que facilita el trabajo de los cirujanos y la recuperación de los pacientes.

"Al poder visualizar todo el interior de la articulación, mejoramos la capacidad de diagnosticar todo tipo de lesiones. Además, al ser una técnica mínimamente invasiva, con la artroscopia de rodilla la recuperación es más rápida: la estancia postoperatoria es menor, las molestias tras la cirugía se reducen y el índice de complicaciones o infecciones es prácticamente nulo".

Artroscopia de rodilla para menisco y ligamentos: ¿en qué casos se recomienda?

Actualmente, la artroscopia de rodilla se utiliza para tratar diferentes lesiones de rodilla, entre ellas:

  • Artrosis. La rodilla es una de las localizaciones más frecuentes de la artrosis. Se produce por un desgaste de las superficies articulares, así como de los meniscos, y se forman osteofitos (crecimiento óseo que forma los “picos de loro”).
  • Roturas meniscales. Frecuentes en personas jóvenes por traumatismos deportivos o laborales, y en personas mayores como consecuencia del desgaste producido por la artrosis.
  • Roturas ligamentosas. Al igual que las anteriores, suelen relacionarse con accidentes deportivos o laborales.
  • Patología femoropatelar. Se produce por desgaste o inflamación de la rótula, situada en la parte anterior del fémur.
  • Lesiones osteocondrales. Se trata de una especie de “úlceras” en el cartílago articular que producen dolor y derrame articular.

Todas estas lesiones pueden ser muy molestas, ya que causan dolor en la parte interna o anterior de la rodilla, impidiendo a los pacientes caminar.

En algunos casos, la rodilla se inflama, provocando derrames articulares, o comienza a "fallar" (sensación de que la rodilla se dobla sola por atrofia o debilidad muscular, derrame o pinzamientos en su interior), lo que genera mucha inseguridad a los pacientes.

Postoperatorio y cuidados después de una artroscopia de rodilla

Normalmente, en las operaciones de rodilla por artroscopia se utiliza anestesia raquídea (administración de un anestésico local en el espacio subaracnoideo o intradural, con el fin de bloquear el estímulo nervioso, sensitivo, autonómico y motor) y la capacidad para andar se recupera pocas horas después de la cirugía.

Además, al no “abrir” completamente la articulación, el postoperatorio no es doloroso.

Tal y como explica el Dr. Giménez, traumatólogo de Quirónsalud Murcia, el paciente puede ser dado de alta a su domicilio el mismo día de la intervención y “podrá caminar con ayuda de muletas en unos días". 

Según el tipo de reparación realizada, podrá hacer movimientos suaves de flexoextensión de la rodilla.

En la mayoría de los casos, "se recomienda realizar ejercicios de contracción muscular sin movimiento (contracciones isométricas) para evitar la atrofia muscular". 

Respecto a las curas tras la cirugía, son mínimas y apenas precisan cuidados especializados.

"Puesto que son heridas muy pequeñas, se realizan curas 2-3 veces por semana que no suelen revertir complicaciones", añade el Dr. Giménez.

¿La artroscopia de rodilla requiere rehabilitación? ¿Cuándo se puede volver a hacer "vida normal"?

La rehabilitación tras la artroscopia de rodilla depende del tipo de lesión y de la reparación realizada.

"En algunas ocasiones, los pacientes necesitan un periodo de rehabilitación funcional para recuperar cuanto antes la movilidad y la fuerza muscular", comenta el especialista en traumatología de Quirónsalud Murcia.

Respecto a la vuelta a sus actividades normales, el Dr. Diego Giménez Belmonte se muestra prudente.

"Si se trata de una lesión meniscal (que es una de las patologías más frecuentes) el paciente puede volver a caminar con normalidad en poco tiempo, habitualmente menos de dos semanas. Por el contrario, si hemos tratado una rotura de ligamento cruzado, la recuperación será más larga. Por ejemplo, en el caso de deportistas, tanto amateurs como profesionales, la vuelta a su actividad deportiva se puede demorar hasta 6 meses".

En cualquier caso, Giménez remarca que las técnicas como la artroscopia de rodilla han supuesto una importante mejora en cuanto a velocidad de recuperación de los pacientes en comparación con las técnicas abiertas clásicas que se usaban hace unos años.


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