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Cuando el amor llega en un polvorín: muchas familias surgieron del cortejo de los soldados a las jóvenes de Los Ramos 

11/02/2024 - 

MURCIA. En el primer tercio del siglo XX, el ejército construyó en el paraje Los Eslabones en Los Ramos, que en aquellos años pertenecía a la pedanía de Torreagüera, un polvorín para almacenamiento de munición, que sería utilizado en la revolución de 1936. El conjunto del mismo estaba compuesto por una vivienda para el mando, alojamiento para tropa y varias cuadras, añadiendo tres galerías excavadas en el monte donde reposaba la munición, una de ellas antigua mina de yeso. Prueba de ello es que junto a este polvorín existían explotaciones mineras de este mineral, que se transportaba una vez extraído desde el monte hasta la estación de ferrocarril, mediante vagonetas sobre raíles con propulsión animal.   

Una vez acabada la guerra civil en 1939, concretamente en la década de los años 40, se encargaría de la gestión, custodia y mantenimiento del polvorín el Regimiento de Artillería nº 18, destinándose a este lugar un cabo primero y 20 soldados. Desde esa época, se almacenaría material inerte procedente, por ejemplo, de las baterías de costa situadas en Cartagena, ya que parte de sus proyectiles fueron trasladados hasta este lugar. 

Mapa del primer tercio del siglo XX, en el que se ubica el polvorín

La intendencia del destacamento se realizaba comprando en la población de Los Ramos, además de algunos productos procedentes del aprovisionamiento del ejército. El agua llegaba al destacamento por medio de un camión cuba, siendo a veces llevada en recipientes cargados por mulas. Periódicamente se realizaban inspecciones del material allí almacenado. Una anécdota fue el accidente que tuvo uno de los inspectores al caer con su motocicleta por un terraplén, fracturándose una pierna. 

El contingente de soldados, como se ha expuesto anteriormente, estaba compuesto por 20 miembros, que eran oriundos de las poblaciones limítrofes, ya que estos solicitaban realizar allí el servicio militar voluntario, que duraba 20 meses. Muchos de ellos encontraron el amor en Los Ramos, puesto cortejaron a las mozas que allí residían. Un ejemplo lo tenemos en el comandante Francisco del Valle, que casaría con una de ellas. 

Militares del polvorín

Otro detalle a resaltar en la función de los soldados allí destinados sería la colaboración civil, por ejemplo, en las temidas inundaciones, colocando en los márgenes del río Segura sacos de arena, para evitar su desbordamiento. 

El polvorín dejó de ser útil y en 1963 fue clausurado. En 1964 se subastó el material inerte allí existente -que fue comprado por una empresa vasca, desarmándose el mismo-, en un campamento levantado para tal efecto y con la autorización pertinente, en el terreno del actual campo de futbol. Las instalaciones y terrenos del polvorín, fueron vendidos a una empresa hortofrutícola. Siempre quedará en la memoria las familias que se formaron gracias al amor encontrado en el destacamento del polvorín.

*Raúl Jiménez y Lorca es cronista de Torreagüera

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