La alcaldesa de Molina de Segura, Esther Clavero, y el líder regional del PSOE murciano, Diego Conesa, en una imagen reciente. Foto: AYUNTAMIENTOMURCIA. Apenas una hora después de conocerse que la alcaldesa de Molina de Segura, Esther Clavero ponía su militancia a cargo del partido por la polémica de su vacunación, el PSOE regional tomaba las riendas en el asunto y suspendía cautelarmente de militancia a la regidora. No sólo eso, la formación socialista que lidera Diego Conesa ha anunciado la creación de una gestora en Molina de Segura.
Este escenario acarrea una crisis institucional, toda vez que Clavero se niega a presentar su renuncia. El partido, incidió Conesa, no le pedirá la dimisión como cargo público. "Entregar el acta corresponde a la alcaldesa y es ella la que tiene que tomar la decisión", dijo, si bien está convencido de que "asumirá las responsabilidades de lo que no haya podido hacer bien durante este tiempo". Podemos, su socio de Gobierno en Molina, y los partidos de la oposición (PP, Ciudadanos y Vox) han reclamado la cabeza de la alcaldesa.
Conesa ha anunciado que el PSOE "seguirá siendo ejemplar y tomando medidas con los compañeros que hayan usado su cargo para saltarse los protocolos". Por otro lado, el líder regional de los socialistas ha iniciado los trámites para presentar una denuncia ante la Fiscalía e investigar "los criterios y el orden de la vacunación seguida por el Gobierno regional saltándose los protocolos".
Clavero, sin embargo, decía en la rueda de prensa que había hablado con Conesa y que él le había manifestado su respaldo. "Él me ha manifestado personalmente su apoyo, porque está claro que si hubiera hecho algo mal no lo hubiera hecho a escondidas", señaló la regidora, que negó haberse valido del cargo político para que le pusieran la vacuna.
La munícipe ha defendido desde el principio que se puso la vacuna "por indicación" de su médico ante el riesgo como paciente de cáncer pese a que la vacunación de los enfermos de esta patología no está indicada en el protocolo del Ministerio durante la primera fase (reservada para residentes y personal sanitario de primera línea). Según su testimonio, la vacunación se hizo "con luz y taquigráficos, a plena luz del día y con otros usuarios que estaban allí presentes". Sostiene que pidió explicaciones a la directora de enfermería del centro de salud y al director del centro médico donde le suministraron la dosis para conocer si le "correspondía la vacuna y que tras la comprobación con el SMS se la administró".
En opinión de la alcaldesa, la polémica es una guerra política tras el escándalo del consejero de Salud, Manuel Villegas, que también se puso la vacuna. "Ha habido una injerencia con fines políticos en su historial médico y que tomará las medidas oportunas al respecto".
No obstante, el Servicio Murciano de Salud (SMS) investigará, mediante la apertura de una información reservada, al médico que firma un escrito justificando la vacunación de la alcaldesa de Molina. Según la Consejería, "se trata de un escrito particular y en ningún caso avalado por la gerencia del SMS". Y añaden: "Se realizó la consulta verbal desde el centro de salud a la Gerencia de Área, y se respondió que no se podía".
