Imagen de archivo de una protesta en Francia. Foto: SYLVAIN THOMAS/DPAMADRID (EFE). A cinco meses de las elecciones europeas de junio y en plena revuelta de los agricultores en países de la Unión Europea, sacar votos aprovechando el hartazgo de los agricultores se ha convertido en una prioridad para algunos partidos políticos, incluido el más representado en la Eurocámara, el Partido Popular Europeo, que está haciendo bandera de la defensa de lo rural.
Las protestas a gran escala de los productores europeos se han extendido a más de una quincena de Estados miembros en el último año y medio, un descontento que refleja la existencia de una crisis a nivel europeo, al margen del origen en cada país de esos movimientos.
La compleja situación que vive el sector, debido a un conjunto de motivos, es un "caldo de cultivo que está generando mucha desilusión y descontento", explica a EFE la eurodiputada española (PSOE) Clara Aguilera, que califica de "aberrante" que tanto la derecha como los verdes lo estén "utilizando" para tratar de obtener votos.
"La derecha y la ultraderecha europea y española están utilizando estratégicamente al sector agrario para decir: aquí estamos nosotros, vuestros salvadores frente a las hordas del Pacto Verde", comenta la eurodiputada del grupo de los socialdemócratas europeos.
Se refiere al Pacto Verde Europeo, una de las principales apuestas de la Comisión Europea en esta legislatura, que aspira a establecer una economía neutra en emisiones con medidas como reducciones de fitosanitarios o exigencias en bienestar animal.
Aguilera también se muestra crítica con el grupo verde europeo y los ecologistas extremistas que "están diciendo que los agricultores no hacen lo que tiene que hacer", al tiempo que reconoce que "en algunos casos no se han explicado bien las cosas".
"Cuando quieres hacer cambios en un sector, automovilístico, de energía o agricultura, tienes que dialogar mucho, hacerles entender la importancia de los cambios que hay que asumir y de la mano con ellos abordarlos", explica.
Según Aguilera, en ese fallo incurrió el exvicepresidente comunitario neerlandés Frans Timmermans, que dejó su puesto de responsable de Clima hace unos meses para presentarse a las elecciones del pasado noviembre en Países Bajos liderando el bloque de izquierdas, que obtuvo menos votos que el ultraderechista Partido de la Libertad dirigido por Geert Wilders.
Timmermans es citado por los conservadores de la Eurocámara como principal responsable de la ira de los agricultores al haber abanderado el Pacto Verde Europeo.
"Estoy convencido de que el gran responsable (...) ha sido Timmermans", dice a EFE el eurodiputado español Juan Ignacio Zoido (PP).
Recuerda que al salir de la pandemia, "lo primero que hizo Timmermans fue poner en marcha la estrategia De la Granja a la Mesa. Y además lo hizo sin contar con (...) el comisario de Agricultura. De ahí vienen todos los males".
Esa estrategia, enmarcada en el Pacto Verde, pretende impulsar una producción y consumo de alimentos más sostenible, reduciendo el uso de pesticidas y aumentando la superficie dedicada a cultivos ecológicos.
Preguntado sobre una posible batalla en España entre el PP y Vox para hacerse con los votos de los agricultores y ganaderos, Zoido opina que los productores no van a tener dudas.
"Creo que no va a haber batalla. Creo que los agricultores tienen muy claro que el PP ha sido un partido con un compromiso adquirido con el sector agroalimentario", señala Zoido. "El camino se demuestra andando", añade.
Para la eurodiputada de Vox Mazaly Aguilar, también la Comisión Europea es "la más culpable" de todo lo que pasa y está convencida además de que las protestas del sector agrario van a aumentar.
"El movimiento iniciado por los agricultores alemanes no va a parar. No es más que la punta del iceberg, estamos viéndolo. Y los franceses van a seguir", señala a EFE.
La "carta a los Reyes Magos" de la eurodiputada de Vox con vistas a las próximas elecciones europeas incluye "una presencia muy importante de eurodiputados en la Comisión de Agricultura (de la Eurocámara) que amara el campo, que supiera lo que sucede con sus agricultores y ganaderos y que estuviera dispuesta a defenderlos a capa y espada".
También, "un comisario de Agricultura que realmente entienda lo que es el campo" y que sea de preferencia "portugués, italiano, francés, español, griego o hasta alemán".
Por su parte, el responsable de Asaja en Bruselas, José María Castilla, se muestra convencido de que, con vistas a las elecciones, habrá partidos políticos, no solo de derechas, que "van a hace guiños al sector agropecuario y pondrán en sus cabezas de lista a personas que vengan del sector".
"Es un error encasillar la agricultura en una ideología concreta", afirma Castilla, que no descarta que surjan nuevos partidos agrícolas.
