MURCIA. Un artículo de la Universidad de Murcia (UMU) publicado recientemente en la revista 'Frontiers in Veterinary Science' evidencia que ciertas estrategias colaborativas de aprendizaje aplicadas en el ámbito universitario favorecen el desarrollo de habilidades y competencias comunicativas, permiten identificar dificultades de comprensión y expresión de los conceptos teóricos y refuerzan la asimilación de conocimientos. El estudio recoge los principales resultados alcanzados en una actividad educativa piloto, consistente en la realización de simulacros de entrevistas sobre ciencia en un estudio de televisión profesional similar a un plató real, que fue desarrollada entre estudiantes del Grado de Periodismo y de Medicina Veterinaria de la UMU, durante febrero y marzo de 2020.
Las entrevistas realizadas fueron sobre OneHealth, o 'Una Salud' en español, "un concepto que sugiere la existencia de una interdependencia y conexión entre la salud humana, la de los animales y la del medio ambiente", ha explicado Asta Tvarijonaviciute, una de las investigadoras principales del estudio. Con esta iniciativa, el alumnado se adentró en la tarea de divulgación científica y aprendió a comunicar de manera sencilla y eficiente conceptos científicos para una audiencia no especializada, desarrollando competencias muy útiles que les servirán a lo largo de toda su trayectoria.
Los objetivos trazados se cumplieron a partir de las percepciones del alumnado y del personal docente implicado, a los que se mandó una encuesta para obtener retroalimentación. Finalmente, de los datos recogidos se desprendió que "esta propuesta, basada en acciones voluntarias, colaborativas y participativas, fomentó la aplicación práctica reforzada de los contenidos teóricos, logrando profundizar en las materias y dinamizando el aprendizaje y la creatividad del estudiantado", ha sostenido Delfina Roca, otra de las responsables principales de la investigación.
Esta acción fue altamente positiva para el profesorado "en términos de intercambio de conocimientos, ideas, habilidades docentes, experiencias y metodologías dentro y fuera del aula, tanto virtual como presencial", ha señalado Silvia Martinez Subiela. De tal manera que, según explica Tvarijonaviciute, la interacción entre expertos de diferentes áreas, tal y como ocurrió con la metodología aplicada en este proyecto entre docentes de Veterinaria y Comunicación, favoreció la resolución de problemas complejos que no hubieran tenido la misma respuesta si solo se hubieran involucrado profesionales de una única disciplina.
Los docentes implicados percibieron beneficios en los estudiantes de Comunicación relacionados con la puesta en práctica de la especialización periodística, el ejercicio profesional de géneros audiovisuales para mejorar las habilidades de expresión en público y el aumento de la confianza en sí mismos al enfrentarse a una audiencia y especialistas de otros campos. Igualmente observaron que, para el alumnado de Veterinaria, la actividad mejoró sus habilidades comunicativas, su conocimiento sobre el tema y su concienciación sobre la importancia de profundizar, asimilar y comprender la información antes de compartirla.
En general, el personal docente manifestó la convicción de que este tipo de iniciativas son útiles y provechosas para el alumnado en cuanto a su futuro desempeño profesional, debido a la capacidad de compartir conocimientos de manera interdisciplinaria y transdisciplinaria, por lo que sería deseable incluirla en el currículo de las dos especialidades. Por su parte, la mayoría del estudiantado aceptó favorablemente la metodología de aprendizaje activo aplicado, que involucra a estudiantes y aumenta su motivación, y que se está utilizando ampliamente para sustituir la llamada enseñanza pasiva tradicional más centrada en el profesor.
En concordancia con esto, "la mayoría de participantes de ambas titulaciones afirmaron que este proyecto les permitió fortalecer los conocimientos adquiridos en el aula, que disfrutaron de la experiencia en el estudio de televisión y de la colaboración con estudiantes de otras facultades, expresando, a su vez, su voluntad de repetir la experiencia", ha indicado Asta Tvarijonaviciute.
Ningún conocimiento sobre ciencia se considera como tal hasta que no se da a conocer a la comunidad científica y a la ciudadanía. En este sentido, "la divulgación científica implica pasar del modelo de déficit que sostiene que el conocimiento pertenece a los expertos para pasar a uno más democrático en el que se tiene en cuenta a la sociedad", ha apuntado Roca. Sin embargo, la enseñanza sobre comunicación o divulgación científica rara vez se incluye en los planes de estudio de las carreras de ciencias en la educación universitaria.
Asimismo, con la actividad realizada se permitió al estudiantado familiarizarse y explorar el mundo de la divulgación científica y mejorar su capacidad para transmitir de manera clara y eficaz los conceptos adquiridos. Según Roca, los estudiantes de Veterinaria, ayudados por el alumnado de Comunicación, tuvieron que traducir los conocimientos especializados a un lenguaje más general, buscando informar con precisión mientras trataban de capturar el interés y la curiosidad de la audiencia, todo ello sin perder rigor.
Marinez Subiela ha añadido que, dado que la mayoría de los graduados de Veterinaria trabajarán en la práctica privada, uno de los beneficios de este proyecto innovador más ampliamente aplicable para ellos será "una mayor capacidad para comunicar temas médicos a veces complejos a los clientes (dueños de mascotas) tanto dentro como fuera de la clínica". Además, la profesora ha manifestado que el alumnado que se dedique a la investigación habrá adquirido habilidades para comunicar sus resultados a una audiencia no especializada.