MURCIA (EFECOM). La naviera francesa CMA CGM ha entrado con una participación del 10 % en la nueva empresa común creada por los constructores automovilísticos Renault y Volvo para fabricar una nueva gama de furgonetas eléctricas, que se quedan con un 45 % cada uno.
En un comunicado publicado este miércoles, a unas horas de una conferencia de prensa en París de los consejeros delegados de las tres empresas, Renault explicó que CMA CGM invertirá hasta 120 millones de euros de aquí a 2026 en esa nueva filial, bautizada Flexis SAS.
Renault y Volvo, por su parte, prevén invertir cada uno 300 millones de euros en los tres próximos años en Flexis SAS, para la que se ha nombrado como responsable ejecutivo Philippe Divry, procedente de la compañía sueca.
Esta sociedad conjunta tendrá su base en Francia y su objetivo es desarrollar una plataforma de furgones eléctricos ligeros con una configuración que permita adaptar diferentes módulos de carrocería por un costo relativamente bajo.
El pasado viernes, el consejero delegado de Renault, Luca de Meo, presentó los planes para convertir la planta que su grupo tiene en Sandouville, cerca del puerto francés de Le Havre, y su complejo industrial, en el centro de producción de esas furgonetas eléctricas.
La inversión de los 300 millones de euros se traducirá en la adaptación de las instalaciones de Sandouville, donde ahora trabajan 1.850 empleados, y en la contratación de 550 en los próximos cuatro años.
Allí se han empezado a ensamblar recientemente los Trafic Van E-Tech, una versión eléctrica de su modelo de furgón Trafic, del que se han fabricado en esas mismas instalaciones más de un millón de unidades.