Calvos y con tres dedos de raíces: el confinamiento no perdona

MURCIA. En tiempos de confinamiento, sólo lo esencial es lo que se tiene en cuenta. Por ello, muchas personas están dejando en segundo plano a aquello que sólo necesitan cuando alguien mira: el cabello bien cortado y teñido, las uñas hechas y la depilación. Y es que parte de la ciudadanía por fin está dándose cuenta de aquello que, en parte, hacía por conformar a la sociedad y no por amor propio.

Son miles las peluquerías que han tenido que cerrar y han dejado huérfanos a millones de clientes que precisan de sus cuidados habituales. Las personas que tienen el pelo corto, o aquellas que acudían a la peluquería cada tres semanas, probablemente estén al borde de un ataque de nervios. Porque, ¿Quién no necesita tener el pelo on fleek (o como dice la gente normal, perfecto), para ir a hacer la compra?

Pues bien, resulta que esto está comenzando a ser un problema. Un tercio de los hombres, sobre todo los más jóvenes y que aún no tienen el complejo de la calvicie, han querido cortar con el problema de raíz -nunca mejor dicho-. Se han rapado al 0, probablemente ante un intento fallido de hacerse un corte de pelo decente que no ha estado exento de algún que otro trasquilón.

Para otros no ha sido tan sencillo. Los que frecuentan los salones de belleza y peluquería con cierta regularidad probablemente ya hayan cogido cita para cuando esto acabe. Es más, muchos preferirán encerrarse en una peluquería durante horas antes que poder volver a disfrutar de la maravillosa libertad. “No sin mis mechas”.

Aquellos y aquellas que basan su belleza en algo que no es innato, tienen dos opciones bien claras: o aguantar el tirón, o echar rienda suelta a sus capacidades estéticas -y artísticas, porque algunos han acabado hechos un cuadro-. Muchos de los influencers y youtubers del momento ya están mostrando lo ‘fácil’ que es maniobrar con el cabello:

Como también era de esperar, la venta de tintes se ha disparado en los supermercados. Por supuesto que es extremadamente necesario llevar el pelo perfecto para estar encerrado. (¿Alguien lo dudaba?). Si bien es cierto que, algunas personas que tienen pelo canoso se tiñen porque el ver estos signos de edad avanzada puede afectar su autoestima. Incluso las raíces pueden causar cierto pavor.

Es necesario que se tomen las precauciones necesarias y que se lean las instrucciones muy bien, pues el daño sí que puede ser irreversible si de verdad no se lleva cuidado. Tampoco se recomienda que, en caso de ser un pelo teñido a mechas, que se intente renovarlas en casa. Pasarse de la raya con el decolorante puede ser catastrófico.

Al final va a ser verdad aquello de que la Covid-19 es socialista: trata a todos por igual. Y por un lado, no hay otra mayor satisfacción que el saber que tanto tu vecino de al lado, como el famoso al que admiras, está en tu misma situación: con pelambrera y a lo loco.

Las uñas de gel, porcelana y semipermanente también son un elemento esencial para muchas, y para muchos. Hay quienes no pueden vivir sin ellas, y menos ahora con el boom de las uñas kilométricas. Para que puedan lucir bonitas, hay que hacer una visita a la esteticien de turno cada mes aproximadamente. Ahora que no se pueden renovar las uñas, se está viendo como muchas no pueden quitárselas y las están dejando crecer lentamente. Y no dicen que sea fácil verlo, precisamente…

Algunas, sin embargo, se alivian al saber que cuando salen a la calle tienen que llevar guantes: los mayores aliados para guardar ese gran secreto. En fin, ya se sabe que diva se nace, pero también se hace.

Tal vez estos tiempos que corren son una oportunidad que brinda el destino para poder aprender a querernos a nosotros mismos, sin tanta floritura ni artificiosidad, que la única que cada uno lleva por dentro.