VALENCIA (MP). El Grupo CaixaBank obtuvo un beneficio atribuido de 707 millones de euros en el primer trimestre de 2022, un 21,9% más, con perímetros homogéneos, respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Asimismo, el resultado contable aumenta un 37,6% sin incluir los efectos extraordinarios derivados de la fusión con Bankia. Teniendo en cuenta los impactos generados por la integración, el resultado cae un 85,2% en tasa interanual, ya que en el primer trimestre de 2021 el resultado fue de 4.786 millones de euros, que incluía una aportación positiva neta a efectos contables de 4.300 millones por el fondo negativo de comercio o badwill y el registro de 28 millones de gastos extraordinarios netos de impuestos.
En los tres primeros meses del año, CaixaBank ha logrado consolidar su fortaleza comercial y financiera pese a la volatilidad de los mercados y la incertidumbre por la invasión de Ucrania, con una muy positiva evolución de la concesión de nuevo crédito y de captación de ahorro a largo plazo, especialmente, fondos de inversión y seguros. Además, se ha producido una significativa evolución interanual de la nueva producción de los seguros MyBox impulsada por los productos de no vida (+71%).
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha señalado que “después de haber completado prácticamente el 90% de las integraciones de oficinas y de las salidas de empleados previstas, podemos focalizarnos cada vez más en el crecimiento del negocio”. Gortázar ha subrayado, nuevamente, la apuesta de la entidad por la inclusión financiera, ya que “CaixaBank dispone de la red comercial más extensa del sector y es la única entidad bancaria en 471 poblaciones a cierre de marzo y tiene presencia en más de 2.200 municipios en España”. “En 2022 esperamos consolidar nuestro crecimiento y seguir apoyando a la economía de la mano de nuestros clientes. Será el primer año del Plan Estratégico que presentaremos el 17 de mayo y que definirá el rumbo y la velocidad de la entidad para los próximos tres años”, ha añadido el consejero delegado de la entidad.
Tomando como referencia la cuenta de resultados proforma que suma los resultados de CaixaBank y Bankia en el primer trimestre de 2021, a efectos de comparativa y sin tener en cuenta los extraordinarios de la fusión, el beneficio crece un 21,9% en tasa interanual desde los 580 millones de enero-marzo del año pasado a los citados 707 millones del actual ejercicio. Esta evolución del resultado de CaixaBank se apoya en el crecimiento del margen de explotación (+5,4%), así como en la reducción en 2022 de las dotaciones para insolvencias (-23,2%) y otras dotaciones a provisiones (-37,7%). Los ingresos core se sitúan en 2.761 millones de euros, con un ligero descenso del 1,7%, marcado, esencialmente, por la caída del margen de intereses (-5,4%) respecto al mismo periodo de 2021 por el entorno de tipos de interés negativos. No obstante, con respecto al trimestre anterior el margen de intereses disminuye solamente un 0,6%.
Respecto a los ingresos por comisiones, crecen hasta los 969 millones de euros, un 2,9% más respecto al primer trimestre de 2021, aunque las comisiones bancarias recurrentes disminuyen un 3,3%, impactadas, entre otras razones, por la unificación de los programas de fidelización de clientes. Mientras, las comisiones por comercialización de seguros se incrementan un 2,3% y las asociadas a la gestión de productos de ahorro a largo plazo (fondos de inversión, planes de pensiones y unit linked) suben un 10,3%. Por su parte, los resultados de entidades valoradas por el método de la participación bajan (-43,1%) tras la desinversión en la entidad austriaca Erste Bank y la no atribución de sus resultados con posterioridad al tercer trimestre de 2021, así como por la toma de control de Bankia Vida a finales de 2021 y su integración global a partir de enero de 2022.
En la cuenta proforma destaca la reducción de los gastos de administración y amortización recurrentes del 4,3%, lo que refleja la captura de sinergias de costes derivados la fusión. En este sentido, los gastos de personal se han reducido un 5,3% y los gastos generales, un 7,2%. Además, en el primer trimestre del año se ha constituido un fondo colectivo por importe de 214 millones para reflejar el impacto estimado derivado del cambio de escenario macroeconómico ante el conflicto en Ucrania. Por otro lado, el fondo COVID-19 se sitúa en 1.196 millones a cierre del trimestre (1.395 millones a final de 2021), dada la mayor visibilidad sobre la situación de los clientes que contaron con medidas de soporte durante la pandemia. El coste del riesgo (últimos 12 meses) se sitúa en el 0,23%.
Los indicadores de actividad se mantienen estables en el trimestre, con el crédito a la clientela bruto que alcanza los 353.404 millones de euros y los recursos de clientes que se sitúan en 619.892 millones de euros pese a la volatilidad de los mercados. En relación a la evolución de la cartera, el saldo de crédito para la adquisición de vivienda (-0,8% en el trimestre) sigue marcado por la amortización de la cartera, si bien con una recuperación de la nueva producción respecto a trimestres anteriores.
La nueva producción de hipotecas y crédito al consumo en España mejora un 14% y 18% interanual, respectivamente, donde la de hipotecas alcanza los 2.122 millones de euros, tras un mes de marzo de fuerte actividad en concesiones y por el lanzamiento de MyHome, un completo paquete de soluciones para el hogar, tanto de financiación para la compra y mejora de la vivienda como para su protección. Junto al dinamismo en el negocio hipotecario, en el primer trimestre se registró una mejor evolución del crédito al consumo, en el que los niveles de nueva producción ya permiten compensar los vencimientos de la cartera. De esta forma, el saldo ha crecido en tres meses un 0,6%. También destaca la buena evolución de la financiación a empresas, que se incrementa un 0,8% y el crédito al sector público (+5,4%). Además, la formalización de créditos a pymes se incrementa un 22%.
Por otra parte, los activos bajo gestión se sitúan en 152.823 millones de euros. La evolución en el trimestre (-3,3%) viene marcada, esencialmente, por el comportamiento desfavorable de los mercados. Sin el efecto mercado, sube un 0,1%. En cambio, las suscripciones netas en productos de ahorro a largo plazo han alcanzado los 1.208 millones de euros en el trimestre y la cuota combinada sube 13 puntos básicos respecto a diciembre, hasta el 29,6%, lo que demuestra la fuerza comercial de la entidad.
Los datos del primer trimestre muestran, asimismo, una adecuada gestión del riesgo, que ha permitido mantener contenida la morosidad y reforzar la tasa de cobertura. Así, la ratio de morosidad se sitúa en el 3,5% a finales del primer trimestre, por debajo del 3,6% en que se situaba a cierre del ejercicio 2021, y la tasa de cobertura repunta desde el 63% al 65%, gracias a la caída de dudosos. En concreto, los saldos dudosos se sitúan en 13.361 millones de euros a finales de marzo, con una caída de 272 millones en el trimestre. Por su parte, la cartera de adjudicados netos disponibles para la venta en España es de 2.223 millones de euros, con una caída en el trimestre de 56 millones de euros tras haberse realizado ventas de inmuebles por importe de 260 millones de euros.
CaixaBank también ha reforzado durante el primer trimestre sus niveles de capital y liquidez. De esta manera, la ratio de capital Common Equity Tier 1 (CET1) se sitúa en el 13,4% (13,2% sin aplicación de los ajustes transitorios de IFRS9), y la ratio MREL total proforma asciende al 26,5%, cumpliendo así con el nivel exigido para 2024. La entidad realizó en abril dos emisiones de instrumentos de deuda senior non-preferred (SNP), una de 500 millones de libras esterlinas y otra de 1.000 millones de euros ya incluidas en esta visión proforma.
El 20 de abril, CaixaBank abonó a sus accionistas 0,1463 euros por acción en concepto de dividendo ordinario con cargo a los beneficios del ejercicio 2021, tras la aprobación por parte de la Junta General de Accionistas celebrada el 8 de abril. Esta distribución de dividendo asciende a 1.179 millones de euros, importe que equivale al 50% del beneficio neto consolidado de 2021, ajustado por los impactos extraordinarios relacionados con la fusión. Los activos líquidos totales se sitúan en 171.202 millones de euros, con un crecimiento de 2.854 millones de euros en el trimestre. El Liquidity Coverage Ratio del Grupo (LCR) a 31 de marzo de 2022 es del 315%, mostrando una holgada posición de liquidez (325% LCR media últimos 12 meses), muy por encima del mínimo requerido del 100%. El saldo dispuesto de la póliza del BCE a 31 de marzo de 2022 asciende a 80.752 millones de euros correspondientes a TLTRO III.
Durante el primer trimestre, CaixaBank ha potenciado la atención personal al reafirmar su compromiso con el colectivo sénior con la puesta en práctica de una decena de iniciativas, entre las que destacan la creación de un equipo de 2.000 consejeros sénior, la ampliación del horario de caja en oficinas y el refuerzo de todos sus canales de comunicación con estos clientes. La entidad extiende así la oferta global de productos y servicios que ya tenía para este colectivo, con el objetivo de ofrecer un servicio excelente y de mantener su liderazgo en este ámbito, en el que cuenta con más de cuatro millones de clientes. En este sentido, fue la primera entidad en España con asesores especializados para personas mayores. Adicionalmente, las sucursales se han reforzado con 1.449 personas más para prestar apoyo a los clientes sénior y a los procedentes de Bankia con los servicios y herramientas de CaixaBank durante la integración operativa.
CaixaBank ha impulsado también un paquete global de medidas para ayudar a la población civil afectada por la invasión de Ucrania. Se ha activado en toda su red de oficinas en España un protocolo especial para la atención a las personas desplazadas que han solicitado acogida como refugiados, con un producto específico de servicios básicos para situaciones de vulnerabilidad -la Cuenta Social de CaixaBank-, un servicio de traducción simultánea para la comunicación con los gestores y medidas para hacer posible la comprensión de documentos y contratos. Asimismo, la población ucraniana tiene en CaixaBank varios servicios gratuitos, como el uso de la red de cajeros con tarjetas de bancos ucranianos y el envío de transferencias a Ucrania y países limítrofes, adonde los civiles se refugian al salir del país: Moldavia, Rumanía, Hungría, Eslovaquia y Polonia.
También ha puesto en marcha una plataforma para canalizar, sin ningún coste, aportaciones de cualquier persona interesada en colaborar a entidades humanitarias de prestigio reconocido. Hasta el momento, se han canalizado donaciones por importe de más de cuatro millones de euros con esta iniciativa. Igualmente, la entidad está impulsando entre sus empleados una campaña de recogida de fondos a favor de Ucrania, con el compromiso de realizar una aportación que iguale la cantidad reunida por la plantilla. Los fondos son gestionados por la Asociación de Voluntarios de CaixaBank, que también se está movilizando para prestar apoyo a las ONG en todo aquello que requieran.