CARTAGENA. Las excavaciones van a recuperar el sector occidental del pórtico del Teatro Romano, algunas de las pinturas de la época y la recreación de los jardines gracias al polen de las plantas de la época recuperado en los rellenos.
Dos mil años atrás, el edificio estuvo compuesto por una planta cuadrangular con una doble galería de columnas y una zona central ajardinada, cuyos restos arqueológicos se quieren recuperar en tres fases divididas por sectores: occidental, central y oriental.
Las excavaciones suponen un hito en la investigación de este tipo de pórticos, y contemplan la excavación de un tercio de la superficie del jardín porticado y la restauración de las pinturas murales conservadas en dos estancias de la galería interior del pórtico, de alto valor científico y patrimonial.
Ahí destaca un templete circular, que aparece flanqueado por dos figuras masculinas atribuidas a los nietos del emperador Augusto, Cayo y Lucio, a quienes está dedicado el monumento. Los fragmentos que se extraigan de los derrumbes que contienen la pintura mural se unirán a los 2.000 recuperados en el año 2006 para componer un gran panel pictórico que formará parte de la exposición del Museo.
El proyecto incluye la reproducción de los jardines mediante el análisis del polen de las plantas originales, cuyos restos se encuentren en las excavaciones.