Fotos: CARLOS CASTRO (EUROPA PRESS) Y CEDIDAS POR EL GRUPO VOX
MURCIA. Un mensaje publicado en las redes sociales trastocó los planes de vacaciones de Juan José Liarte, el portavoz parlamentario del grupo Vox. Macarena Olona, la excandidata de Vox en Andalucía recientemente retirada de la política, emitía un llamamiento a sus seguidores invitándolos a acompañarla en el Camino de Santiago. "La convocatoria de Macarena me pilló con mis hijos en los Picos de Europa, en mi descanso familiar de cuatro días de este verano", relata Liarte a Murcia Plaza. Pese a las primeras reticencias de los hijos ("papá, no queremos más política"), no lo dudaron. Aquella no era una actividad política más, sino una oportunidad para vivir una experiencia diferente, más profunda quizá. "Llamé a Paco, que estaba en Oviedo, y reorganizamos nuestras vacaciones". Paco es Francisco José Carrera, su compañero en la Asamblea Regional, en la que ejerce como secretario de la Mesa. "Así fue cómo, en tiempo récord, sin tener materiales ni sacos de dormir, nos dirigimos hacia Sarria", la localidad lucense donde Olona fijó la primera etapa de la peregrinación.
Los dos diputados murcianos se reencontraron con viejos compañeros del partido (que, recordemos, les expulsó en junio de 2020, aunque en enero de 2022 la Justicia les dio la razón, obligando a Vox a readmitirlos). "Algunos no los veíamos desde el congreso de Vistalegre de 2020". La experiencia también sirvió para hacer nuevos amigos y conocer testimonios. Y aunque es inevitable reflexionar sobre las cuestiones que afectan a los españoles en estos duros momentos, en El Camino no se habló de política, sostiene Liarte. "Se ha elucubrado estos días que la convocatoria de Macarena suponía una demostración de fuerza para formar un nuevo partido, pero nosotros no hemos visto nada de eso". Al contrario: "Las conversaciones eran muy de andar por casa, en un tono muy veraniego y de vacaciones".
La peregrinación fue también la gran oportunidad para volver a encontrarse con Macarena Olona, con quien compartieron siglas e ideas hasta que el partido los defenestró. Aunque Liarte no se siente un hombre mitómano ("Ni por Santiago Abascal ni por Ortega Smith"), admite que Macarena "era una persona especial" porque, "a diferencia de otros líderes, ella se desvive por su gente; es ella la que sirve y no al revés, como pasa mucho en los dirigentes políticos". Liarte mantiene un gran recuerdo de su visita al Congreso de los Diputados para defender la retirada del Estatuto de Autonomía. "Macarena nos recibió con muchísima gentileza e hicimos muy buenas migas". No en vano, reflexiona el murciano, "nosotros disentimos de esa máxima que defiende Vox de que lo importante es el proyecto, no las personas". A su juicio, "la política sin las personas no tiene sentido, pues al final las ideas son conceptos abstractos y se doblegan ante la realidad".
El Camino empezó con un madrugón en Sarria, cuyo inicio de etapa estaba previsto a las siete y media de la mañana, pero se retrasó ante la elevada presencia de los medios de comunicación. Transcurrieron 21 kilómetros de recorrido a pie, hablando y charlando con la comitiva que secundaba a Olona, hasta su llegada a las dos y veinte de la tarde a Puertomarín. Entre los peregrinos se encontraban antiguas caras de Vox como Bertrand Ndongo y "también un señor de Torre Pacheco", el único murciano presente además de Liarte, sus hijos, y Carrera. En la segunda mañana grabaron un vídeo anunciando que "en breve" esperaban tener la oportunidad de presentar sus "peticiones al Santo Apóstol", como así manifestaba Liarte, que argüía: "España demanda mucho de nosotros, y si no tenemos un poco de ayuda divina va a ser complicado hacer frente a esos desafíos". Sin embargo, la urgencia de la política manda. "No pudimos completar el Camino hacia Santiago. Nos tuvimos que volver a Cartagena, porque esta semana hay que negociar varios decretos con el Gobierno regional".
A las tres de la madrugada ya estaban de regreso en la ciudad portuaria. El curso político se reanuda en los próximos días, ya con la mirada puesta en las elecciones de 2023. Pero al menos en el caso de Liarte y Carrera retornan a sus habituales quehaceres con el poso que deja toda una peregrinación espiritual. "El Camino de Santiago es el símbolo de una España de otro tiempo, que tenía una gran confianza y fe en su futuro y en sus propias fuerzas. Un símbolo que nosotros deberíamos recordar ahora y poner en marcha de nuevo, más que nunca". Palabra del peregrino Liarte.