MURCIA. ASAJA Murcia ha valorado el año 2022 como "muy difícil y complicado" para el campo murciano, debido a la subida "desmedida" de los costes de producción, la "apatía" en los mercados y la bajada en el consumo de productos hortofrutícolas en los mercados internacionales.
En un comunicado, el secretario general de la organización profesional agraria, Alfonso Gálvez, ha indicado que el pasado año fue "muy difícil" para los productores y comercializadores del sector agroalimentario murciano, quienes tuvieron que hacer frente a unos "elevadísimos costes de producción, motivados en parte por la guerra entre Rusia y Ucrania".
Gálvez ha destacado también la "gran apatía comercial que ha propiciado unos grandes altibajos comerciales tanto en los precios en origen como en destino", y todo ello, "con un contexto hídrico marcado por la abolición del trasvase Tajo-Segura por parte del Gobierno de Pedro Sánchez".
Además, el titular de ASAJA Murcia ha apuntado que durante el 2022 las producciones agroalimentarias murcianas se enfocaron al mercado europeo y, fundamentalmente, a las grandes cadenas de distribución. En este sentido, ha considerado "necesario" apostar por la diversificación comercial y por nuevos mercados como Estados Unidos, Canadá, Asia y Emiratos Árabes.
El portavoz ha comentado que el 2022 "pasará a la historia por las grandes asignaturas pendientes" del sector agroalimentario de la Región de Murcia, entre las que ha citado la unidad y organización, la "nula" concentración de la oferta, la "inexistencia" de uniones empresariales con empresas de otros países, el "ínfimo" nivel de marketing y comunicación y los "escasos" niveles de investigación y desarrollo.
"Nuestro gran caballo de batalla sigue siendo el agua, necesitamos reforzar protegiendo el trasvase Tajo-Segura y trabajar para conseguir tener disponibilidad de agua, y no depende del agua desalada, cuyo coste económico es muy alto y no es viable, para los agricultores y ganaderos murcianos", ha señalado Gálvez.
No obstante, durante el pasado 2022 ASAJA ha alcanzado una serie de logros, como las ayudas directas por la guerra de Ucrania, con un paquete de 169 millones de euros para productores de leche de vacuno, caprino y ovino incluido en el plan nacional de respuesta a las consecuencias del conflicto aprobado por el Gobierno.
También ha mencionado los 193,47 millones de euros dirigidos a los sectores del vacuno de carne -financiación máxima de 110 millones, de los que 97,7 corresponden al subsector de la vaca nodriza y 12,3 al engorde de terneros-; ovino y caprino de carne -31,7 millones-; avicultura de carne -10 millones de euros-; cunicultura -3 millones- y cítricos -38,7 millones-.
A esto ha sumado otros 300 millones de euros de ayudas directas por el incremento de los costes de los productos fertilizantes.
En materia fiscal, ASAJA ha destacado como logro, además de las reducciones en módulos del IRPF publicadas en abril con motivo de la climatología adversa en 2021, que se pueda seguir tributando en el Régimen de Estimación Objetiva de Módulos del IRPF en 2023 y 2024.
Además, se ha logrado que se reduzca la factura del gasóleo en un 35% y de los fertilizantes en un 15% para 2022 y 2023 en los módulos del IRPF, y que se aplique una reducción del Rendimiento Neto en Módulos de un 15% en 2022 y un 10% en 2023 (antes era del 5%).
En la misma línea, ha hecho referencia a la reducción de los módulos del IRPF para las explotaciones afectadas por los incendios forestales, y que en los módulos se fije de forma estructural el coeficiente corrector de piensos adquiridos a terceros y de cultivos en tierras de regadío que utilizan electricidad.
En Estimación Directa se ha conseguido un incremento de gastos de "difícil justificación" del 5% al 7%, y, tanto para los de módulos del IRPF como para los de Estimación Directa, se ha conseguido la exención en el IRPF de las ayudas de los eco-regímenes. Al hilo, ASAJA ha recordado que trabaja para que queden exentas de tributar en IRPF las ayudas que se han concedido con motivo de la guerra.
En la Ley 30/2022, de 23 de diciembre, por la que se regulan el sistema de gestión de la Política Agrícola Común y otras materias conexas, se ha incluido la de la flexibilización de las tarifas eléctricas.
Además, los titulares de explotaciones agrarias sean autónomos o empresas, incluidas las cooperativas agrarias y las comunidades de regantes, podrán acogerse a los mecanismos de flexibilización temporal de los contratos de suministro de energía eléctrica.
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